Eran muchos los que debatieron durante el fin de semana si el Gran Poder saldría o no a las calles por las precipitaciones que se esperaban, sin embargo, finalmente realizó su traslado a la parroquia de Santa Teresa en su Santa Misión, aunque no pudo cumplir con el recorrido inicialmente previsto, que lo habría llevado al Cerro del Águila.
En este templo a 6 kilómetros de la basílica del Gran poder permanecerá hasta el próximo viernes 5 de noviembre, fecha en la que nuestro Señor será trasladado hasta la Catedral de Sevilla para celebrar una misa pontifical en la mañana del sábado, la cual culminará con la procesión en su paso hasta la basílica de San Lorenzo.
Durante esta semana son muchos los fieles que van a rendir culto al templo y quienes, al preguntarles por sensaciones, nos confiesan que no tienen palabras para describir sus emociones al poder ver al Señor diariamente. Silencios, lágrimas y brillo en los ojos, es lo que nos trasladan los vecinos del barrio, orgullosos de tener al Gran poder tan cerca de sus casas.
Una imagen parecida a la de 1956
Hace justo 56 años los fieles veían ya la imagen que ahora pueden contemplar en la parroquia de Santa Teresa, uno de los templos con mayor calidad de extramuros por los frescos vanguardistas del pintor Juan Miguel Sánchez.
En 1956 el Gran poder ocupaba el templo para pasar 18 días con motivo de las Misiones Generales, con un montaje que ha inspirado totalmente al que se puede ver ahora. Un gran mural de la Transverberación de Santa Teresa, donde recibe culto hasta el viernes 5 de noviembre.