Una operación conjunta de Agencia Tributaria y Policía Nacional ha permitido desmantelar un entramado empresarial situado en Jerez e incautar más de 600 kilos de cocaína procedente de Sudarmérica que una organización criminal pretendía introducir en España ocultándolos entre mercancía legal.
Según informa la Agencia Tributaria en un comunicado, la operación ha acabado con la detención de siete personas por los presuntos delitos de pertenencia a organización criminal y tráfico de drogas.
Las investigaciones comenzaron con el análisis de un posible entramado empresarial dedicado a la importación de grandes cantidades de cocaína desde Sudamérica mediante contenedores marítimos.
Para ello, la organización disponía de diversas empresas, con las que hacía importaciones de mercancía legal con el objeto de ocultar la sustancia estupefaciente. Fruto de la colaboración y coordinación internacional, se incautaron alrededor de 305 kilos de cocaína en el puerto colombiano de Barranquilla.
Esta sustancia estupefaciente se encontraba oculta entre la mercancía legal, teniendo como destino final España, concretamente, una de las empresas que los miembros de la organización criminal española tenían a su nombre.
Así, como consecuencia de esta incautación, los grupos de investigación intensificaron las vigilancias y seguimientos sobre las personas relacionadas con el entramado empresarial, quienes serían los receptores de la mercancía ilícita incautada en Colombia.
Meses más tarde, nuevamente a través de los canales de cooperación y colaboración internacional, la Policía Nacional de Colombia, bajo la dirección de la Fiscalía General de ese país, remitió, a través de las autoridades colombianas y la Fiscalía Especial Antidroga del Campo de Gibraltar, información sobre la llegada al puerto de Algeciras de dos contenedores sospechosos de ocultar una importante cantidad de cocaína entre la mercancía legal de plátanos declarada.
Estos dos contenedores fueron descargados en el puerto de Algeciras. De manera paralela, los grupos de investigación actuantes iniciaron los trámites pertinentes, solicitando la entrega vigilada de ambos, que fue autorizada por parte de la Fiscalía Especial Antidroga del Campo de Gibraltar. Los agentes procedieron al reconocimiento de ambos contenedores. En uno de ellos, se localizó entre la mercancía legal, un total de 244 tabletas que arrojaron un peso bruto aproximado de 300 kilos de cocaína.
Dos días más tarde, el contenedor en el que se ocultaba la droga salió del puerto algecireño transportado en un camión que tenía como destino el aparcamiento de un polígono industrial de Jerez, donde se mantuvo estacionado durante toda la noche.
A primera hora de la mañana del día siguiente, el dispositivo operativo policial establecido en la zona comenzó a observar movimientos extraños de un vehículo que se encontraba en clara actitud de control de los movimientos del camión. Seguidamente, apareció en el lugar otro vehículo con tres personas, quienes interactuaron con el camionero.
OCULTA EN UN CARGAMENTO DE PLÁTANOS
Tras la conversación entre los cuatro individuos, el camionero introdujo la carga del camión en una nave que se encontraba a escasos metros. En ese momento, los agentes actuantes pudieron comprobar que la nave se encontraba en obras, no teniendo maquinaria frigorífica en su interior para mantener la cadena de frío del cargamento de plátanos que se encontraba en el contenedor, motivo que hizo pensar que se materializaría la descarga con el fin de recoger la sustancia estupefaciente oculta entre la mercancía.
De esta forma, la actuación conjunta entre la Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y Policía Nacional sorprendió, en el interior de la nave, a los miembros de la organización criminal cuando descargaban la droga oculta entre las cajas de plátanos. Como consecuencia de ello, fueron detenidas las cuatro personas que se encontraban en la nave.
Paralelamente, los agentes volvieron a detectar el vehículo que controlaba al camión desde primera hora de la mañana, advirtiendo que era conducido por un integrante de la organización quien, al observar la presencia policial, aceleró con la intención de marcharse de la zona, siendo interceptado y detenido.
Las detenciones finalizaron con el arresto de otras dos personas. Por un lado, fue detenido el conductor del camión que hizo el trayecto inicial desde el Puerto de Algeciras hasta el polígono industrial de Jerez, mientras que por otro lado se detuvo a la copropietaria de las empresas importadoras de los dos envíos de sustancia estupefaciente.
El modus operandi de esta organización criminal consistía en la introducción de la sustancia estupefaciente en la península escondiéndola entre la mercancía legal. Este sistema es conocido como 'de empresa a empresa', y destaca por la dificultad que supone para las unidades investigadoras su detección, ya que las empresas elegidas cuentan con un elevado movimiento comercial marítimo legal y un histórico comercial en principio fuera de cualquier sospecha por las autoridades policiales.