El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este miércoles que las mascarillas volverán a ser obligatorias en exteriores tal y como pedían algunas comunidades autónomas. No obstante, esta medida no se aplicará en situaciones como la práctica de deporte al aire libre o si no encontramos en espacios naturales como la playa o el monte.
Por su parte, el presidente de la Generalitat Valencina, Ximo Puig, no está muy de acuerdo con el protagonismo que ha adquirido esta medida tras la Conferencia de Presidentes. Puig tiene su propia estrategia para hacer frente a la situación actual de la pandemia y no es otra que "la aceleración máxima de la vacunación". “El punto central no es la mascarilla, el punto fundamental es la vacunación”, ha afirmado el presidente.
La Comunidad Valenciana supera el 90% de la población vacunada mayor de 12 años y el objetivo del gobierno valenciano es continuar fomentando la vacunación para lograr la máxima protección posible y paliar los efectos de la sexta ola. Puig ha tomado medidas para animar a todos los ciudadanos a vacunarse, como la puesta en marcha de 42 puntos de vacunación estable con cita previa para poner la tercera dosis de refuerzo y también inocular primeras dosis a aquellos que todavía no se han puesto ninguna. De esta manera, se busca descongestionar la atención primaria y facilitar así el ritmo de inmunización.
El líder socialista también ha apostado por ampliar el pasaporte covid a más espacios como gimnasios o cines, circos, instalaciones deportivas y sedes festeras en los que se consuma bebida o comida, además de pedirlo en establecimientos de hostelería y restauración independientemente de su aforo. La medida entrará en vigor este viernes 24 de diciembre después de que el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) lo autorizara. En este sentido, se busca que los lugares públicos cerrados sean más seguros ya que solo concentrarán a gente vacunada.