Una vez pasadas las fiestas navideñas el planeta taurino despierta de su letargo invernal y comienza la preparación de una temporada que se hace ya inminente y ahí tenemos en Niebla y Aracena, por lo que respecta a nuestra tierra, los primeros carteles en la calle.
Los toreros han comenzado a prepararse y ya se anuncian esas primeras actuaciones y así el próximo sábado, en tierras portuguesas -en Mourao, concretamente- harán su primer paseíllo de la temporada el rejoneador Andrés Romero y el matador David de Miranda.
El torero triguereño ha sido uno de los grandes damnificados con la reducción del número de festejos a causa del Xovid durante las dos últimas temporadas. Asegura el triguereño que “todas las personas, cada una en su trabajo, nos hemos visto afectadas por la pandemia y como los toros son un espectáculo de público aún más, por lo que a toreros, como puede ser mi caso entre muchos compañeros que veníamos de triunfar en 2019, nos ha frenado mucho”.
David tan solo pudo hacer el paseíllo la pasada campaña en nueve ocasiones, pero él no se lamenta sino que, para él, “la temporada fue bonita dentro de las dificultades que nos puso la pandemia. Fue una temporada que me permitió crecer y madurar con tardes importantes como las de las Islas Azores, Arévalo, Huelva y, por supuesto, Palos de la Frontera”.
Hay que recordar lógicamente la Corrida Pinzoniana que, para el torero, “fue una excelente prueba. Una tarde especial. Los toreros tenemos que hacer gestas en nuestras carreras y Palos fue la primera de mi carrera. Una tarde que le quise regalar a la afición de toda Huelva y, gracias a Dios, las cosas salieron bien y la pude disfrutar mucho”.
El invierno ya ha pasado y hay que mirar el presente. Para David, “han sido unos días muy bonitos para los toreros, entrenando, haciendo muchos tentaderos y con la ilusión intacta para la temporada que, si Dios quiere, se avecina muy importante”.
Y, en estas fechas, ¿qué pasa por la mente del torero? David de Miranda afirma que solo “pienso en el día a día, siendo feliz y así disfruto del camino y, aunque tenga adversidades, hay que aprender y sacar el lado positivo de todas las cosas que suceden para disfrutar después delante del toro”.
El objetivo más perseguido es “hacer el paseíllo en ferias importantes. ¿Madrid? Lo sueño cada día, aunque el triunfo de 2019 ya fue y ahora sueño con hacer de nuevo el paseíllo en Madrid, con una faena importante, con un toro encastado, los olés…”
A largo plazo, David es consciente de que “siento que me queda mucho camino por recorrer para estar donde quiero y eso me sirve para levantarme cada día con más ganas de seguir luchando para alcanzarlo”.
El torero triguereño no piensa actualmente en realizar ninguna gesta durante la temporada aunque “ojalá se rodeen las circunstancias para hacer de nuevo una gesta o tener más tardes especiales, pero, en principio, no tengo pensado nada”.
Hombre fiel al equipo con el que viene trabajando en los últimos años, para la próxima temporada le seguirán acompañando “Jorge Buendía como apoderado; Alfredo como mozo de espadas; lidiando Fernando Pereira Cándido Ruiz, un tercero que irá suelto y, a caballo, estarán Rafa Carbonell y Pepe Cartes”.
David de Miranda ya tiene todo preparado para iniciar pasado mañana la temporada en tierras portuguesas donde va a participar en un festival al lado de los rejoneadores Andrés Romero y Salgueiro da Costa y de los matadores Álvaro Lorenzo, Diego Carretero y Joao Silva ‘Juanito’, lidiando reses de Murteira Grave. Ojalá sea el primer aldabonazo de una campaña que debe repetir los grandes éxitos cosechados durante la temporada de 2019 y que supuso el lanzamiento del triguereño.