El Ayuntamiento de Jerez ha recibido cinco ofertas para la compra de una finca abandonada en la calle San Honorio, junto a la plaza Belén, que debió ser expropiada a sus anteriores propietarios después de que incumplieran con su deber de conservación y rehabilitación.
Según el teniente de alcaldesa de Urbanismo, Infraestructuras y Medio Ambiente, José Antonio Díaz, la presentación de estas cinco propuestas constata el “interés” que existe por la compra de este inmueble, cuya venta salió a licitación pública hace apenas un mes.
Las cinco propuestas superan “con creces” el precio mínimo que había sido fijado por el Ayuntamiento, que era de 59.766,08 euros, según se ha puesto de manifiesto en la Mesa de Contratación celebrada este miércoles y en el transcurso de la cual se ha procedido a la apertura, admisión y valoración de dichas ofertas.
Al igual que en los procedimientos de venta forzosa -inmuebles propiedad de particulares que han incumplido sus deberes urbanísticos-, los de enajenación de edificios expropiados por el Ayuntamiento se enmarcan en de la estrategia del Gobierno local de recuperar zonas degradadas y darle vida al centro histórico, con especial atención a la zona intramuros.
A partir de ahora, la Mesa de Contratación tendrá que evaluar las diferentes ofertas y trasladar a la Junta de Gobierno local una propuesta de adjudicación. Con posterioridad se requerirá al licitador para que presente la garantía definitiva, que consiste en el 5 por ciento de su oferta. Si toda la documentación aportada es correcta, se elevará de nuevo a Junta de Gobierno Local para que se adjudique la venta de la finca.
El solar en cuestión hace esquina entre las calles San Honorio, Jesús de las Tres Caídas y la propia plaza Belén, en concreto la más próxima a la iglesia de San Lucas.
Se trata de un edificio de 354 metros cuadrados de superficie, dos plantas de altura y patio central, con cronología predominante del siglo XVIII. Desde el Consistorio se propone su rehabilitación parcial con el objetivo de evitar su progresivo deterioro y conservar sus valores arquitectónicos.
