El Servicio Andaluz de Salud (SAS) planteó a inicios de esta semana cerrar el Servicio de Urgencias del Centro de Salud del Olivillo, según denunció ayer el portavoz de Marea Blanca Gaditana, Antonio Vergara.
La decisión se tomó al término de una reunión mantenida en la sede del Distrito Sanitario Bahía de Cádiz-La Janda en la que participaron profesionales sanitarios que mostraron su disconformidad, dado que, en la práctica, suponía dejar sin atención pública a toda la población de intramuros.
Vergara asegura en conversación telefónica que el SAS pretendía, además, derivar a los usuarios a la Clínica San Rafael, de Pascual, empresa con la que la Administración autonómica ha firmado un contrato por importe de 771,4 millones para sus centros hospitalarios en la capital, El Puerto, Sanlúcar, Villamartín y Huelva, lo que supondría “otro paso importante para la privatización progresiva de la Sanidad Pública” por parte del Gobierno regional del PP y Ciudadanos.
Sin embargo, “al parecer, esta medida se ha reconsiderado finalmente”, asegura, ante la constestación recibida. No obstante, advierte de que el colectivo no bajará la guardia. “Nuestra indignación se ha calmado por el momento ante esta posibilidad, pero esperamos que esta rectificación no se haya tomado por la proximidad de las elecciones andaluzas, sino que sea definitiva”, agrega. Y, finalmente, advierte de que, de no ser así, “aseguramos que nuestra reacción de protesta sería inmediata y buscaríamos todas las alianzas que nos fuera posible para obligar a dar marcha atrás”.
Este martes, el SAS tuvo que aclarar, asimismo, que el cierre de la unidad de cuidados paliativos del hospital Puerta del Mar es temporal, dado que se van a llevar obras en la planta, tras la denuncia de Autonomía Obrera y CGT.
