Ha pasado más de un año y medio desde que entrara en vigor el Real Decreto 901/2020 por el que se regulan los planes de igualdad y su registro para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, y que establece la obligatoriedad -desde el pasado mes de marzo- para las empresas de más de 50 personas trabajadoras de negociar e implantar un plan de igualdad.
Las empresas de más de 100 trabajadores y trabajadoras ya estaban obligadas a contar con un plan de igualdad con anterioridad a este Real Decreto.
No obstante, aún existe desconocimiento e incumplimientos al respecto. Son muchas las empresas que, pese a estar obligadas por ley, carecen de un plan de igualdad e, incluso, ni siquiera han iniciado los trámites establecidos.
En este tiempo, CSIF ha participado –y participa- en la negociación de decenas de planes de igualdad en empresas malagueñas, tratando de promover el diálogo y el consenso para avanzar en la igualdad real.
Los planes de igualdad incorporan la igualdad en el funcionamiento y gestión diaria de las empresas y administraciones públicas, fijando los objetivos, así como las estrategias y prácticas a adoptar para su consecución.
La importancia de negociar
La central sindical subraya la importancia de negociar y aprobar un plan de igualdad en una organización para eliminar los desequilibrios entre mujeres y hombres; asegurar que los procesos de gestión de recursos humanos respetan el principio de Igualdad de trato y oportunidades; favorecer la conciliación laboral, personal y familiar; y prevenir el acoso sexual y el acoso por razón de sexo.
A través de sus delegados y delegadas sindicales en los centros de trabajo, CSIF forma parte de las mesas negociadoras de los planes de igualdad en cada vez más empresas y administraciones públicas, asesorando, guiando, reivindicando y avanzando por la igualdad real y efectiva en el ámbito laboral.
Aunque cada vez más empresas muestran su compromiso en el desarrollo de los planes de igualdad, aún queda camino por recorrer en este ámbito. Entre los principales obstáculos, CSIF señala las dificultades para consensuar medidas sobre conciliación de la vida laboral y familiar, así como para fomentar la corresponsabilidad, por parte de las empresas en la negociación de los planes.
Falta de transparencia
Además, el sindicato detecta cierta falta de transparencia por parte de las empresas en la publicación de los registros retributivos de altos cargos, algo que, a juicio de CSIF, obedece al hecho de que la mayoría de estos puestos suelen estar ocupados por hombres en exclusiva.
Esta situación es especialmente injusta para la mujer trabajadora, que además de tener más dificultades para acceder a puestos de responsabilidad y, consecuentemente, a su desarrollo profesional, tampoco podrá ver nunca subsanada esta discriminación al omitirse en los registros retributivos bajo el pretexto del derecho a la privacidad y protección de datos.
Por ello, CSIF considera esencial la implantación de planes de igualdad que contemplen medidas expresas de fomento de la corresponsabilidad, que contribuyan a que las cargas y los cuidados familiares dejen de recaer sobre la figura de la mujer.
A ello se suma que en ocasiones la valoración de puestos de trabajo que realiza la empresa no es real, ya en muchos casos, como ha detectado CSIF, hay trabajadores que desempeñan funciones de superior categoría a la que se recoge en su contrato.
Además de la falta de transparencia, la central sindical denuncia que muchas empresas tratan de eternizar las negociaciones de los planes de igualdad poniendo en marcha la primera de las cinco fases –compromiso, diagnóstico, diseño, implantación o ejecución y seguimiento o evaluación- pero sin convocar la mesa negociadora. En algunos casos, esta situación se sucede sin que se produzcan avances durante más de un año, que es el plazo máximo de negociación que establece el RD 901/2020 y cuyo incumplimiento puede conllevar multas de hasta 187.515€. La situación llega a judicializarse en las ocasiones más graves de bloqueo.
Afortunadamente, estos casos son una minoría y cada vez son más las empresas que demuestran su compromiso y responsabilidad demandando asesoramiento para la negociación de los planes. A este respecto, CSIF destaca el interés y la buena disposición de las pequeñas empresas –de menos de 50 personas trabajadoras- malagueñas que, pese a estar exentas de la obligación legal de contar con un plan de igualdad, no dudan en contactar con los delegados sindicales para informarse e iniciar negociaciones.
Superar los roles
Para la central sindical, los sesgos de género de nuestra sociedad obligan a la mujer a asumir el rol de cuidadora, encargándose de forma mayoritaria de las responsabilidades domésticas y familiares.
Esta situación tiene repercusiones también en el ámbito laboral, siendo la mujer trabajadora la que acapara la mayoría de reducciones de jornada, contratos a tiempo parcial y excedencias, llegando incluso a no poder incorporarse al mercado laboral.
Ante esta situación discriminatoria, insiste en la urgencia de que tanto empresas como administraciones públicas adopten medidas claras que favorezcan la conciliación y la corresponsabilidad, desde horarios flexibles y jornadas intensivas, hasta la creación de bolsas de horas.
Por tanto, CSIF señala la importancia que tienen los planes de igualdad en las distintas organizaciones y centros de trabajo, que establecen el marco para debatir, acordar y poner en marcha todas estas medidas, al tiempo que hace un llamamiento a las empresas para que accedan a negociarlas en las mesas correspondientes y avanzar así hacia la igualdad real.
En este sentido, el sindicato también reivindica la creación de la figura del delegado o delegada sindical especializada en Igualdad y Violencia de Género en los centros de trabajo como garante del correcto desarrollo de actuaciones en esta materia.