Ecologistas en Acción denuncia la masificación de las embarcaciones y la falta de civismo de algunos bañistas que suponen un riesgo mortal para diversas especies marinas. La alarma ante este problema saltó cuando el pasado viernes, un grupo de buzos encontró cerca de Jávea un pez luna muerto con marcas de hélices y signos evidentes de haber sido embestido por un embarcación a motor.
Un día más tarde se avistó a un grupo de ballenas en la costa de la Marina Alta perseguidas también por barcos como objeto de diversión.
La ONG Ecologistas en Acción alerta que no se trata de un hecho aislado y que la masificación náutica está causando problemas medioambientales. Según la organización, una buena parte de los usuarios utilizan el mar como un circuito de alta velocidad y provocan muertes directas de cetáceos. A este problema se suma la fuerte contaminación acústica provocada por los motores, algo que altera el hábitat marino y causa estrés, pánico y fuga de especies.
Ante esta situación, los gobiernos valenciano, catalán y balear reclaman un corredor mediterráneo seguro para los cetáceos y la formación ecologista propone que se realicen estudios científicos por parte de tripulaciones formadas académicamente para mejorar el conocimiento y situación del as especies y evitar el estrés y la contaminación a la que están sometidos.