El alcalde de Sevilla, el socialista Antonio Muñoz, se ha mostrado confiado este miércoles en que la Junta de Andalucía sea "sensible" e inicie "cuanto antes" un proceso de "chequeo y diálogo" con el sector hostelero y hotelero que desemboque en la aprobación de una ley con la que poder implantar la conocida como tasa turística.
"Espero que la Junta sea sensible a iniciar la tramitación en el Parlamento de Andalucía y que, cuando la ley se apruebe, definitivamente tengamos un escenario y un entorno de recuperación económica", ha señalado el primer edil sevillano en declaraciones a los medios.
Muñoz ha insistido en que "es el momento" de abrir un proceso de diálogo y diagnóstico de la mano del sector, como ha sido su compromiso con los empresarios, tal como ha recordado. Ha animado, por tanto, al consejero de Turismo, Cultura y Deporte, Arturo Bernal, a analizar con todas las partes los "pros y contras" de la tasa.
No obstante, el alcalde ha reconocido que la implantación requiere de una ley y esto "no es un huevo que se echa a freír. Esto no es una implantación automática", ha apuntado, al tiempo que ha recordado que, además de Sevilla, los ayuntamientos de Granada y Málaga "se han manifestado inicialmente a favor" de este instrumento.
La postura del alcalde hispalense es que haya "una normativa andaluza o también española" que "no obligue a nadie sino que, sencillamente, el municipio o ciudad que, por sus circunstancias turísticas, quiera implantar la tasa", lo pueda hacer. "Es necesario --ha abundado cuando se le ha preguntado por esta cuestión--, porque supondría una importante recaudación".
El alcalde Antonio Muñoz ha defendido en los últimos meses que la tasa turística debe implantarse "cuanto antes" para que la ciudad pueda disponer de fondos extras con los que afrontar desde mejoras en el patrimonio y en los barrios hasta inversiones en promoción en los destinos de larga distancia (EEUU y Asia, por ejemplo), así como para "amortiguar las externalidades negativas que produce" un flujo importante de turistas en zonas del Casco Antiguo, caso del barrio Santa Cruz.