José María García Rincón, recientemente jubilado, ha sido director del Museo Provincial de Huelva y arqueólogo al servicio de la Junta, tiene claro que el último hallazgo en San Pedro tiene entidad suficiente: “Tenemos una muralla monumental, de tres metros de altura, que está metida en un supermercado, lo cual no es lo más idóneo, pues debería estar en un espacio público”.
Su previsión es que en las próximas obras de remodelación de la plaza salgan más elementos de interés, en concreto la continuidad de la muralla, y al respecto plantea si “sería factible hacer una cripta arqueológica que pudiera verse en ese espacio público, sin interferir tampoco excesivamente en la plaza”.
También cree que la próxima remodelación de la fuente de la plaza de Las Monjas “se podía haber aprovechado para integrar los restos” encontrados hace años -restos de un edificio portuario administrativo del foro portuario romano de Huelva- y que se taparon. “Podrían haber sido más ambiciosos y abrir una ventana para ver esos restos”, afirma el arqueólogo, que no obstante matiza que “no pasa nada, están ahí, están tapados y cuando quieran se puede hacer”.
García Rincón cree que se podría hacer una ruta arqueológica en Huelva con restos “relevantes” como los de San Pedro, plaza de Las Monjas, plaza Arqueológica, Banco de España, edificio de Hacienda y plaza de La Soledad, junto con los restos que hay en los cabezos de Huelva.