Los niños 'de Segura' vuelven a liarla viajando en tren a Francia

Inés de León dirige "A todo tren 2", secuela de la supertaquillera "A todo tren: Destino Asturias" -que vieron un millón y medio de espectadores-, por el empeño personal del director y productor Santiago Segura, que no podía ocuparse de la dirección, aunque sí actúa en la película -brevemente- y ha escrito el guion.

Cortometrajista acreditada que rodó su primer largo en 2019 -la comedia romántica "¿Qué te juegas?", producida por Bowfinger International Pictures, la empresa de Segura-, De León era la opción perfecta, una mujer de "total confianza" capaz de potenciar el aspecto que más le preocupaba al cineasta madrileño: "Que la mujer es muy divertida y muy cómica".

"Y creo que lo ha hecho muy bien", afirma Segura en una entrevista realizada en Madrid con motivo del estreno, este viernes, de la película en las salas de cine.

Puestos a hablar de las mujeres, la directora defiende que "lo más feminista de esta película es la igualdad a la hora de ser un desastre".

"Es reivindicar el derecho de los seres humanos a cagarla, independientemente de su raza, sexo o religión", abunda Segura, que cedió el testigo a De León porque materialmente no le daba tiempo a dirigirla él y sacar adelante su "película veraniega", en "respuesta" a los que le criticaban "estrenar películas de Navidad en verano".

Medio en broma se queja de que el público que vio ayer un preestreno comentaba que era "mejor que la uno" -la primera la dirigió él-, pero asegura que no le ha tocado el ego: "Cuando haces una segunda película no es para que sea peor que la primera, este guión nos lo curramos muchísimo, es el guion que más nos ha costado", a él y a Marta González de Vega, coguionista también de la saga "Padre no hay más que uno".

El filme narra más aventuras de los mismos niños de la primera, que vuelven a viajar en un tren, esta vez camino de Francia, sin adultos al cargo. Hace un año, Ricardo (Segura) y Felipe (Leo Harlem), que debían llevarlos a un campamento, se quedaron fuera del tren dejando a los niños dentro. Ahora Clara (Paz Vega) no se fía ya de ellos y decide ocuparse personalmente con ayuda de su amiga Susana (Paz Padilla).

Por insólita que parezca la pareja, "funcionan muchísimo", considera de León.

"Paz llegó al set "muy formalita, muy actriz de Hollywood, y yo como soy tan pesada y tan cargante, venga y venga, le hablaba y le hablaba, y ella 'sí, sí, pero yo estoy centrada' -se ríe Padilla-. Y al final hacía los TikTok conmigo, ponía los carteles..."

"Es que Paz, además de hacer su personaje, lo suyo es divertir a la gente, hacer risas, bromear, y ella es muy generosa", apunta Vega, con un punto de 'jet lag' porque llegaba de Salvador donde está rodando "un dramón" sobre la guerrilla.

"Pero disfruto mucho con la comedia -señala Vega a EFE-, es muy liberador hacer cosas divertidas para los niños, sin pretensiones, que no siempre la vida tiene que ser seria. Me hace ilusión hacer una película que mis hijos vean, que se rían, familiar".

El hecho es que la comedia está hecha a la medida de "las dos 'Pazes'", afirma Segura, con una Padilla "en su salsa" desde la primera escena en la que Vega asume el rol de 'responsable'.

"Yo no quiero ser nada y quiero serlo todo, estoy en un momento de averiguar, de descubrir y de demostrar, yo lo que venga (...), como Paz (Vega), que hace de todo. Otra cosa es poder demostrarlo", lanza, reivindicativa.

La dos repite el elenco de la uno -con los niños Luna Fulgencio y Sirena Segura, Alan Miranda, Eneko Otero, Javier García y Verónica López-, y suma a Carlos Iglesias y a la propia directora que interpreta un personaje, sin olvidar el cameo del turco Kerem Bursin, "Brad Pitt" de estas insólitas Thelma y Louise.

"Digamos que hemos mejorado la fórmula, como los detergentes", bromea Segura.