Este asesinato tuvo lugar el pasado 28 de marzo cuando Juan G., mató a tiros a su esposa, Carmen I., y después se quitó la vida en el interior de un vehículo hallado en un paraje rural. El asesino dejó en el domicilio familiar de Benahadux una carta manuscrita dirigida a sus tres hijos en la que adjuntaba instrucciones sobre su seguro de vida y las escrituras de la vivienda.
La Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género decidió inicialmente dejar este caso en investigación en espera de nuevos datos que confirmasen el móvil del crimen, aunque el representante de este organismo, Miguel Lorente, ya avanzó el lunes que el 'modus operandi' era el propio de los asesinatos machistas.
En total, en lo que va de año se han producido 13 asesinatos de mujeres, un 85 por ciento de las cuales, no habían presentado denuncias previas por malos tratos. Según los datos oficiales, sólo dos de las fallecidas habían acudido a la justicia y ambas contaban con una orden de protección en el momento del asesinato.
Los datos reflejan asimismo, que un 70 por ciento de las mujeres asesinadas eran de nacionalidad española y que el grupo más numeroso tenía entre 31 y 40 años de edad. No obstante, en lo que va de año han muerto por esta causa tres mujeres menores de 30 años.
La región más castigada por esta lacra social en el primer trimestre del año ha sido Andalucía, donde se cuentan cuatro asesinatos machistas. Le siguen Cataluña y Madrid, con dos casos en cada comunidad autónoma y Asturias, Baleares, Canarias, Comunidad Valenciana y Castilla y León, con un crimen en casa una.
En cuanto a los asesinos, el 61,5 por ciento no intentó quitarse la vida, algo que sí trataron de hacer cinco de los criminales, de los que dos, entre ellos el homicida de Lucainena de las Torres, lo consiguieron.
