El secretario general del Partido Popular de El Puerto, Javier Bello, exige al Gobierno de España que "retire de las distintas calles de la ciudad, muchas de ellas muy cercanas a centros educativos y parques infantiles, la cartelería de la última campaña elaborada por el Ministerio de Igualdad, que encabeza la podemita Irene Montero con la complicidad del PSOE de Pedro Sánchez, con mensajes que rayan lo obsceno y que en El Puerto causan incomodidad a muchas familias que así nos lo han trasladado".
Bello señala que "es un bochorno que nuestros escolares estén obligados, sin criba de edad, a recibir mensajes explícitos relativos a “la masturbación femenina de mujeres de más de 60 años o el sexo durante la menstruación”, bajo el paraguas de la Campaña 'Ahora que ya nos veis, hablemos'; sin tener en cuenta en absoluto el impacto que puede tener en nuestra infancia, cuya
educación tienen que elegir sus padres y madres o tutores y nunca puede estar marcada por una imposición ideológica como la que tratan de aplicarnos, en una adoctrinamiento sin parangón".
Desde el Partido Popular de El Puerto se enfatiza en “que además es un insulto y una ofensa a todos los españoles que comprueban como sus impuestos son utilizados para sufragar este tipo de campañas millonarias mientras hacen malabares para llegar a finales de mes, con una economía que se derrumba, con una inflación subyacente superior al 7 %, los terroristas en su casa, los golpistas volviendo y fuera de la cárcel. Con la aprobación de leyes destructivas como la Ley Trans o la de sólo sí es sí, con el Euribor más alto de los últimos años, con la cesta de la compra a precios desorbitados o con la luz y la gasolina más alta de la historia”.
Javier Bello denuncia la “soberbia del Ministerio de Igualdad de Montero y Sánchez que mientras se erigen como abanderados del feminismo y la Igualdad, se constata que lo único que han hecho con su gestión y sus acciones es un retroceso sin precedentes en la protección de la mujer a la que dicen defender, con leyes chapuzas que aún no han corregido y cuyas terribles consecuencias continúan reduciendo las penas de los agresores y violadores, y en muchos casos dejándolos en libertad¨.
