Tras recordar los "roles" que, a su juicio, se suceden en la mayoría de los mensajes publicitarios actuales y que, en opinión de la concejala socialista Leticia Teboul, siguen abundando en la desigualdad de las mujeres, la concejala de la Mujer, Ada Alejandra Hernández Luz, respondió con contundencia a la iniciativa del PSOE en el sentido de que "el Observatorio Andaluz para la Publicidad No Sexista ya publicó en 2004 un decálogo por medio del Instituto Andaluz de la Mujer que no tenía nada que ver con la realidad y la prueba evidente es que, recientemente, en 2010, ha sustituido muchos de los conceptos que entonces proclamada como dogmas de fe".
Así, en referencia a dicho Decálogo, la concejala dijo querer rebatir cada uno de los puntos del mismo, dirigiéndose a los promotores de la moción para pedirles que "no critiquen si alguien quiere promover modelos que consoliden pautas tradicionales. Dejen que lo haga, y si alguien quiere promover lo contrario, pues que lo haga también, pero no imponiéndoselo a nadie".
Abundando en el Decálogo que inspiraba la moción socialista, Ada Hernández afirmó también que "actualmente existe la publicidad de estándares de belleza sinónimos de éxito tanto para hombres como para mujeres", y en este sentido añadió que "fijarse sólo en el de las mujeres es feminismo en el más negativo sentido de la palabra", por lo que defendió que "tanto las mujeres como los hombres decidan por sí mismos" y pidió nuevamente que "no intenten imponer nada a nadie".
Siempre bajo el criterio de que la libertad individual de hombres y mujeres debe prevalecer sobre las permanentes tentaciones de "regular" sus conductas y voluntad, la concejala del PP dijo también que "no vale criticar los anuncios que ofrecen soluciones a los deterioros que produce la edad en el cuerpo de la mujer, además de que también hay anuncios para hombres", y consideró que "sólo desde un complejo de rancio feminismo se puede entender que las mujeres consideren anulada su libertad por ver un simple anuncio referido a ellas, cuando en otros casos existen los mismos anuncios referidos a los hombres".
Ada Hernández se dirigió al grupo ponente pidiendo que "no se metan en lo que cada mujer quiera para sí misma; dejen que la mujer elija la forma de sentirse realizada y si lo quiere hacer trabajando fuera de casa, que lo haga; si lo quiere hacer compatibilizando ambas cosas, que lo haga. Dejen ya -insistió- de considerar a la mujer inepta e inculta, que no sabe decidir cómo quiere realizarse en la vida".
En este mismo contexto, la concejala popular recordó que hoy en día son igualmente numerosos los anuncios que recurren al cuerpo de la mujer y del hombre, por lo que reiteró que "criticar sólo una de las partes es también rancio feminismo".
Igualmente, en su "repaso" al Decálogo defendido por la moción socialista, Ada Hernández calificó el séptimo punto del mismo como "infumable", y se preguntó "¿Qué tiene que ver un anuncio en el cual las mujeres se muestran movidas por algún capricho con que dicho anuncio justifique las prácticas violentas que se ejercen sobre las mujeres?", considerando también que, en el punto siguiente, "se vulneran de forma vejatoria los valores y derechos de las mujeres reconocidos en la Constitución", calificándolo de "teatralidad y pura exageración porque, en general, las empresas de publicidad saben muy bien lo que es lícito y lo que no, y cuando alguna lo transgrede, es sancionada".
Por último, tras insistir en el sesgo de "sexismo feminista" que, a su juicio, se pone de manifiesto en la defensa de un lenguaje que establece distinción entre "jóvenes y jóvenas, ustedes y ustedas, miembros y miembras, etcétera”, la concejala de la Mujer recordó a la oposición socialista que "estamos en una sociedad libre, donde los hombres y mujeres son libres, y donde por tanto cada cual es responsable de la publicidad que decida hacer, siempre que respete la Ley", afirmando que "sólo desde la mentalidad socialista de dirigir y decir qué es lo que tiene que hacer la sociedad se puede pretender imponer criterios y, en este caso, bajo el falso argumento de supuesta modernidad".
Para Ada Hernández, "las mujeres son, somos, mayores de edad y tenemos derecho a elegir y decidir por nosotras mismas", por lo que, a su juicio, el Decálogo socialista propuesto "es puro feminismo trasnochado", por cuanto "tan desfasado, trasnochado y extremista es el machismo que cree que el hombre es superior a la mujer como lo es el feminismo que, como primera regla, tiene al hombre como enemigo y, como segunda, combatirle".
"Me parece una barbaridad -concluyó la concejala del Equipo de Gobierno- que propongan que el próximo curso escolar, indiscriminadamente, porque ni siquiera señalan edades, se adoctrine a los niños y niñas de Torremolinos con este feminismo trasnochado y ramplón pero, sobre todo, ¿quiénes somos nosotros para suplantar e invadir el terreno de los padres, que son los que tienen que decidir sobre qué enseñanzas extraescolares se les imparten a sus hijos?".
La intervención justificaba sobradamente la intención del voto contrario a la moción socialista del Grupo Municipal del PP, hacia el que se dirigieron también críticas desde los bancos de la oposición por lo que consideraron una intervención "excesivamente dura" de la concejala.
Fue, sin duda, el asunto "estrella" de un Pleno en el que no faltó la habitual batería de preguntas más "domésticas" al Equipo de Gobierno, la mayoría de las cuales serán respondidas por vía escrita.