La Guardia Civil ha detenido en Melilla a un hombre de 66 años de edad de nacionalidad de española cuando pretendía embarcar en un ferry de Almería con 63 paquetes de droga ocultos en un doble fondo de su vehículo, que arrojaron con peso total de 41,4 kilogramos de polen de hachís.
Según ha informado este martes un portavoz de la Comandancia, la actuación ha tenido lugar en el puerto melillense, durante el control de vehículos y pasajeros que embarcaban con destino a la localidad andaluza, cuando tras una primera inspección visual, los guardias civiles actuantes apreciaron indicios sobre la parte trasera del vehículo, en concreto en el interior del maletero.
En una segunda inspección y con la ayuda del can del Servicio Cinológico de la Guardia Civil, el animal especializado en la detección de drogas "marcó sin género de dudas la misma zona que previamente levantó sospechas a la fuerza actuante".
El portavoz ha detallado que el equipo de registros de la Guardia Civil del Puerto fijó su atención en el depósito de combustible, donde descubrieron la sustancia distribuida en un total de sesenta y tres paquetes de tamaño similares y que por su textura y color, pudiera tratarse de polen de hachís.
La droga intervenida ha arrojado un peso total de cuarenta y un kilos con cuatrocientos gramos (41,40 kg), alcanzando un valor de ochenta y cinco mil setecientos sesenta euros (85.760 €), según las tablas actuales que emite la OCNE (Oficina Central Nacional de Estupefacientes).
El ocupante del vehículo es un varón de 66 años, de nacionalidad española y tras su detención, ha sido puesto a disposición judicial en calidad de detenido como supuesto autor de un delito contra la salud pública, en su modalidad de tráfico de drogas, junto a la droga intervenida y el vehículo utilizado en la comisión del ilícito penal.
Con esta actuación, la Guardia Civil ha asegurado que evita la distribución y comercialización en el mercado ilícito del orden de ciento sesenta y cinco mil seiscientas dosis (165.600) de este tipo de estupefaciente.
