Desde el sindicato CSIF hacen un balance malo de lo que ha sido el verano para los trabajadores del SAS. Según Antonio Prieto, delegado de este sindicato, ya se llevaba denunciando la situación y “no estábamos de acuerdo en que para afrontar este plan de vacaciones haya que recurrir al cierre de camas, de agenda y a la reducción de personal”.
Esto se ha unido al “ajuste presupuestario tan tremendo que está ejerciendo el SAS desde principios de año y los profesionales están desbordados”, explica.
En el caso del Hospital, explica que ha habido pacientes que han estado ingresados en plantas que no son de la especialidad. Prieto ponía el ejemplo de “mujeres gestantes o niños en la planta de neurología de adultos”. Y en cuanto a la Atención Primaria es “muy gráfica la foto que se puede hacer en cualquier centro de salud una mañana. La gente tiene dificultades para acceder a su médico. Las citas están en más de quince días y la gente no lo tolera”.
El verano no ha hecho más que “agravar los problemas que veníamos arrastrando”. Desde el sindicato explican que en lugar de recuperar lo que se ha perdido en la pandemia se está recurriendo a cierres y recortes que aumentan las listas de espera. El problema está “en la contratación. Se recorta el personal y las plantas están sobrecargadas de trabajo”.
Prieto teme que la situación “va a continuar porque el ajuste presupuestario es de todo el año. Esto se va prolongar, como mínimo, hasta el presupuesto de 2024. No soy muy optimista”.
