Este protocolo ha funcionado con rapidez y eficacia, lo que ha impedido que el escape de agua de la embarcación alarmara a los barcos que había en la zona, pese a que en un principio se barajó la posibilidad de que se tratara de fuel.
Una vez ocurrido el choque, el puerto montó, como medida de precaución, barreras anticontaminación para evitar la salida de estas sustancias del recinto portuario o la extensión de las mismas por la dársena portuaria.
El suceso ha ocurrido sobre las 13:20 horas, cuando a un Euroferrys que se encontraba atracado en el muelle-dique se le rompieron los amarres de sujeción al muelle y se produjo un movimiento lateral hasta llegar a colisionar con una embarcación de mercancías atracada en el muelle de las Azucenas.
Esa otra embarcación se encontraba justo en el lado opuesto y, en ese momento, se encontraba descargando trigo, han precisado las fuentes, que han destacado que la rápida actuación de los remolcadores ha impedido que el choque fuera mayor.
El Euroferrys se encuentra ahora de nuevo atracado y la actividad portuaria continúa con total normalidad.