Para Alcántara, “pese a las dificultades económicas que vienen atravesando el conjunto de las administraciones locales, la empresa pública se está demostrando como un instrumento eficaz y eficiente de gestión de un servicio fundamental”.
De esta forma, la federación de izquierdas quiso “salir al paso de cualquier intento de utilizar los problemas económicos que padece Algesa para provocar una privatización de este servicio. En Algeciras tenemos experiencia y memoria y todavía nos acordamos de cómo dejo el servicio la última empresa privada que lo gestionó; con una deuda millonaria, una flota de vehículos inservible y una importante inquietud ciudadana por la pésima calidad del servicio”.
En una clara referencia al Partido Popular, el portavoz económico de IU trajo a colación lo sucedido en las vecinas localidades de La Línea y San Roque, “donde las empresas privadas concesionarias salieron huyendo, dejando tras de si un caos que sólo el rescate de la empresa pública de Mancomunidad ha podido solventar”.
“En la gestión de los servicios públicos ya conocemos el modelo del PP, que en Algeciras dejó una deuda millonaria con Urbaser y en otras poblaciones de la comarca han tenido que venir otros a sacarlos del atolladero cuando la nefasta calidad del servicio era un clamor entre la ciudadanía”, sentenció José Luís Alcántara.
El dirigente de IU afirmó igualmente que su formación política está trabajando para solventar la situación creada por la Hacienda Pública en Algesa y tiene como principal prioridad que esta no afecte ni a la prestación del servicio a los ciudadanos, ni a las nóminas de los trabajadores.
Tras conocerse el pasado viernes el embargo, los socios del equipo de Gobierno municipal (IU y PSOE) mantuvieron un encuentro para analizar la situación creada en la empresa municipal y valorar los riesgos. Ambos concluyeron que no existía peligro de impago de las nóminas a los trabajadores, una garantía que le fue trasladada al comité de empresa por el consejero delegado de Algesa y concejal de Educación, Juan Lozano.
El embargo ha provocado otro conflicto político en torno a Algesa, después de que Lozano asegurara el viernes haber informado a los responsables municipales de la situación, y de que, tanto el alcalde, Diego Sánchez Rull, como la teniente de alcalde Inmaculada Nieto negaran haber tenido constancia de la existencia de la deuda.
Además, el conflicto recuerda anteriores fricciones acaecidas en el pacto de Gobierno por diferencias respecto de la financiación de la empresa municipal de limpieza.