Así lo indicó el presidente de esa comisión, el ex ministro Wim Deetman, de religión protestante, en la presentación de un primer informe centrado en cómo mejorar la ayuda a las víctimas de abusos por parte de religiosos.
Esta comisión independiente, que fue creada por la propia Iglesia Católica en marzo pasado tras numerosas denuncias de abusos por parte de religiosos, tiene previsto presentar su informe final en noviembre de 2011.
La comisión, además, quiere que la Conferencia Episcopal le informe en julio próximo sobre cómo pretende cambiar la estructura del actual organismo de ayuda a las víctimas, que se conoce con el nombre Recht en Hulp(Justicia y Ayuda), y a la que reprocha falta de independencia, transparencia y profesionalidad. Deetman indicó en rueda de prensa que ese organismo, creado en 1995 con muy “buenas intenciones”, necesita una "mejora considerable porque las víctimas lo necesitan.