“Siempre tuvo una espinita: que nunca se le había considerado como un pintor”, precisó Mateo, presidenta de la Fundación Rafael Alberti, entidad dependiente de la Diputación de Cádiz, radicada en El Puerto de Santa María y que ha prestado la mayor parte de los fondos que se podrán ver hasta el próximo 1 de mayo.
El lema de la exposición, El Alberti oculto. Diálogo de Venus y Príapo, remite a la temática “fresca, vital y erótica”
que siempre caracterizó al espíritu del poeta y que, en su faceta pictórica, trasladó al papel mediante una sucesión de curvas y óculos como metáfora del cuerpo y sexualidad femeninos.
“Nunca dejó de pintar a lo largo de su vida incluso durante el exilio en Argentina lo hizo como medio de vida. Pintó en las cosas más peregrinas”: