El motivo de esta iniciativa en Sanlúcar vino dado por la lucha de sus asociados por la igualdad de derecho del hombre con la mujer en una situación que viene planteándose desde hace 20 años. Los afectados adelantan que el 95 de las custodias es concebido a las madres, el 2% es compartida y el 3% a los padres.
La subdelegación sanluqueña recuerda que la Ley del Divorcio se creó en el año 1981 y que se modificó en el año 2005. También que en países como Alemania, Austria, Australia, Bélgica, Dinamarca, Estados Unidos, Francia, Inglaterra, Italia, Portugal, República Checa, Suecia, Perú y Puerto Rico se acepta la custodia compartida.
Quiere resaltar que “una cosa es el matrimonio y otra la familia. Un divorcio rompe un matrimonio pero no debe romper una familia porque en el 90% de los casos los damnificados son los hijos. Pedimos igual de derecho por el porcentaje que tratamos en Sanlúcar con respecto al resto de la provincia es el mismo, el 95% de las custodias es para la madre”.
En beneficio propio de la mujer
Este colectivo sanluqueño, que a través de Raúl Buzón ha adelantado que este problema afecta a más de 200 hombres en la ciudad, ha hecho saber que la custodia compartida también es beneficiosa para la mujer porque de esta manera se puede desarrollar mejor tanto a nivel profesional como social, así como en otros ámbitos de la vida.
APIF-Sanlúcar defiende que “la custodia debe ser compartida para que los hijos tengan padre y madre y para que haya igualdad de condiciones en caso de finalizar un matrimonio Los hombres nos sometemos a un juicio sin garantía procesal y somos castigados con la privacidad de un derecho. Queremos estar con nuestros hijos en igualdad con respecto a las madres”. Y recuerda que el decano de Psicólogos de Madrid, Fernando Chacón, aseguró que la custodia compartida es una buena medida y debe aplicarse siempre que sea posible, exceptuando malos tratos o residencia alejada de los progenitores. También que el fiscal general de Estado, Cándido Conde-Pumpido, consideró evidente la necesidad de la reforma de varios artículos del código civil porque el actual se creó en una época diferente a la evolución del país. Igualmente, que existe una encuesta donde en el 83,60% se está a favor de la custodia compartida y en el 4% se está en contra. En este sentido, los padres que están sujetos a un régimen de custodia compartida tienen unos niveles de conflictividad en las relaciones con la pareja que son inexistentes. En este sentido, quiere hacer mención especial a que la ONU y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos defienden la custodia compartida.
La subdelegación de Sanlúcar reinvidica “el bien del menor dado que la educación, bienestar y cariño es cosa de la madre y el padre. Se ha dado el caso de que hay mujeres que han utilizado a sus hijos como medio de conflicto entre la pareja, con lo que ha originado un daño psicológico para el pequeño y para el padre. Al día de hoy en Sanlúcar, parece más una tradición dar la custodia a la madre que velar por los intereses del menor, que necesita el cariño de su madre como de su padre, no sólo de una de las partes”.
El dolor de las familias
A nivel particular, Raúl Buzón quiere añadir que “la inmensa mayoría de los hombres que solicitan la custodia compartida estamos condenados al no, sin que podamos velar por los intereses del menor. Sólo pedimos la custodia compartida, que la madre y el padre tengan la igualdad de derecho. El niño es un ser humano, al que hay que proteger y darle cariño, por ambas partes Hay un estudio psicológico que refleja que lo mejor para el menor es la custodia compartida. No queremos la desigual que tenemos con respecto contra la mujer y por supuesto en nuestros casos no tenemos nada contra ellas”.
Quiere ser más contundente cuando resalta que “no más lágrimas de abuelos, padres, tíos, amigos, allegados... Al niño no se le separa del padre sino de toda una familia. En España se están dando casos de custodia compartida en comunidades como Cataluña y Aragón”.
La Subdelegación de APIF en Sanlúcar quiere que esta situación no se quede en el olvido y por eso seguirá luchando para que el hombre pueda lograr la custodia compartida.