La manifestación, a la que han asistido miembros de organizaciones como Ecologistas en Acción, Greenpeace, Izquierda Anticapitalista, Solidaridad Obrera o CGT, se ha celebrado en un ambiente festivo y familiar.
"Vendo isótopos radiactivos (cesio, yodo, plutonio y más), garantía de hasta 24.000 años" o "Más consumo, más nuclear = Ecocaos", eran algunas de las pancartas que se podían leer entre los manifestantes, muchos de los cuales llevaban molinillos de papel en defensa de las renovables.
El coordinador general del área de energía de Ecologistas en Acción, Javier González, ha explicado a EFE que el objetivo de la convocatoria es exigir al Gobierno que cumpla su palabra, "cosa rara", y que presente un calendario de cierre de las centrales, que "no hacen ninguna falta, son peligrosas, generan residuos que están ahí miles de años, y sólo sirven para enriquecer a unos cuantos".
"Cuanto antes las cerremos, mejor", ha sostenido, y más después del accidente de la central japonesa de Fukushima, algo que debería hacer que el Gobierno se replanteara su política nuclear.
No obstante, ha señalado que "quien manda" en esta cuestión no es el Ejecutivo ni el ministro de Energía, Miguel Sebastián, sino "las multinacionales eléctricas".
Javier González ha asegurado que en 2020 España podría cubrir "perfectamente" las tres cuartas partes de la energía que necesita a través de las renovables, y que se podría llegar al cien por cien en una década más, gracias a la investigación y los avances que se están produciendo.
"España es un país pionero en eso, estamos enseñando a todos cómo se hace, y es posible", ha garantizado.
Por su parte, el candidato de IU a la Presidencia de la Comunidad, Gregorio Gordo, también presente en la manifestación, ha reiterado su oposición a la energía nuclear y ha exigido que en la próxima legislatura Madrid produzca al menos un 25 por ciento de la energía que necesita a través de las renovables.
El candidato de IU ha señalado que el Gobierno central debe plantear un calendario de cierre de todas las centrales, no sólo de Garoña (Burgos), ya que la nuclear es una energía que plantea riesgos para la seguridad y la salud de los ciudadanos, como ha quedado patente tras el accidente de la central de Fukushima el pasado mes de marzo.
Gordo ha lamentado que tanto el Gobierno socialista como el PP no se sitúen al lado de la ciudadanía en esta cuestión, sino al lado de las multinacionales de la electricidad.