Desde este lunes, el Gobierno ha puesto sobre el terreno a 170 hombres “para hacer que Nápoles vuelva a ser una ciudad cívica”.
“Estamos como al principio: el Gobierno interviene una vez más. Tendremos que amenazar con que ésta será la última vez. Hace falta una solución final al problema y agradezco a los militares que todas las veces nos sacan de los apuros”, agregó, en una comparecencia de hace varios días retransmitida en directo por televisión.
El jefe del Ejecutivo expresó entonces su deseo de que tras las elecciones municipales de los próximos 15 y 16 de mayo cambie algo la actuación de la administración local de la ciudad de Nápoles y de los municipios del entorno del Vesubio y así pueda mejorar la situación de la recogida de basuras.