En los últimos días hemos visto como Benetússer se ha convertido en un punto de referencia para la ayuda humanitaria y donaciones del pueblo roteño. La razón atiende a un matrimonio, Rofer Fernández y Carmen Ruiz, que llevan residiendo en esa ubicación más de un lustro y se han visto afectados por las devastadoras consecuencias de la Dana. Durante cuatro días agentes de la Policía Local han prestado servicio en labores de seguridad en esta zona, y será la localización para las expediciones futuras; jóvenes de la localidad se han desplazada para ofrecer sus esfuerzos en todo lo necesario desde limpieza hasta reparto de material; y, por último, una expedición de tres vecinos han transportado material directamente.
Varios empresarios de la localidad se unieron para recopilar material de limpieza (más de 200 botas de agua y miles de litros de lejía entre otros) para entregarlo a Rofer y Mari Carmen, y a sus vecinos; también destinaron el 40% restante de lo entregado a vecinos de la localidad y a la Hermandad del Nazareno de Benetússer.
"Yo no tengo ni palabras para agradecer a mi pueblo" expresaba Carmen Ruiz en una entrevista en exclusiva a Paco Campaña para el programa 'Rota de Cerca' de 7TvRota. La roteña confesaba que "siempre he querido a mi pueblo y he tenido el acercamiento", aunque no se esperaba estas muestras de solidaridad porque "a partir de los cincos años he creído que te puedes olvidar un poco de la gente". Sin embargo, en un tono a medio caballo entre la satisfacción y la sorpresa, Carmen afirma que "me he dado cuenta de que mi pueblo es impresionante". La roteña adelanta que su agradecimiento es el de todos sus vecinos que han visto como un pueblo ubicado a más de 700km de distancia se vuelca de lleno con su causa.
Carmen Ruiz menciona la labor de la Policía Local que les hace partícipes de que su calle hoy esté limpia: "nosotros percibimos que tenemos más ayuda ahora, nosotros somos afortunados de estar como estamos". Ruiz cuenta en exclusiva en la citada entrevista cómo vivió el primer día de esta catástrofe natural: "mi marido estaba trabajando y tuve el impacto de esa noche sola. Eso fue horrible. Es algo que tiene en la cabeza y que te hace llorar". Más allá del primer día adelanta que "el problema que ha venido después es que estábamos encerrados y no podíamos hacer nada". Carmen Ruiz profundiza en que durante las primeras horas tras las inundaciones: "los compañeros de mi marido nos trajeron andando las primeras cosas, pero los roteños sois los que nos habéis dado la vida porque primero vinieron los tres Reyes Magos (Alberto, José y Miguel) y ahora han venido otros tres Reyes Magos".
Rofer Fernández recuerda en la entrevista que "desde el minuto uno empecé implorando por botas de agua porque se terminaron en toda la comarca valenciana y Pablo ha traído cantidades industriales". Como afectado cuenta que "va a empezar una tercera etapa cuando quitemos el lodo y es ahí donde se va a ver la necesidad de personas que lo han perdido todo". Rofer hizo distinción entre tres tipos de pérdidas: humana, de vivienda y vehículos, en este último puntualiza que todo el mundo lo ha perdido. Fernández habla acerca de la idea de "ayuda de barrio" emprendida por su mujer como propulsora inicial y él como altavoz a través de las redes sociales: "funcionó de maravilla porque tenemos cubiertas todas las necesidades de aquí".
Nuevamente incidieron en la casualidad que supone que el destino de los agentes de Policía Local de la provincia de Cádiz fuese su municipio, Benetússer, sumándose al azaroso encuentro entre miembros de Hermandades del Nazareno de Rota y Benetússer. Un hecho que Fernández lo resume como un "no sé cómo explicarlo". Rofer finaliza su entrevista a la televisión local roteña con un claro mensaje: "aquí no se van a olvidar de Rota, te lo aseguro. Tenemos vecinos que no sabían ni ubicarlo en el mapa y ya están preparando excursiones para conocerlo. Esta es la parte positiva de las tragedias que une muchas veces.