El primer coro de Ceuta en pisar las tablas del Falla rinde homenaje con su tipo a las diferentes culturas que se entremezclan en la localidad norteafricana, en concreto musulmanes, hindúes, cristianos, gitanos y judíos. Es al menos lo que se intuye en una presentación en la que acusan ciertos problemas de vocalización. Los fallos en la interpretación persisten a lo largo de todo el repertorio y complican la comprensión de los tangos. Su particular visión de la inmigración y del Carnaval, en defensa de las agrupaciones de fuera y de las ilegales, centran las letras de ambas piezas. Flojos los cuplés, con remate inesperado. Un baile por cada cultura en el popurrí. La letra, por desgracia, resulta prácticamente incomprensible.
Lo mejor Se les agradece la intención y el cariño, viniendo por primera vez al Concurso gaditano
Lo peor Los problemas de vocalización a lo largo de toda la actuación
