Estas cifras suponen en la práctica duplicar el volumen de recogida contabilizada durante 2010. En aquel entonces fueron 15.269 litros los retirados de los ocho contenedores que estuvieron en funcionamiento.
En cuanto a los resultados trimestrales, la primavera y el verano se convirtieron en los periodos de mayor recogida, con 9.892 litros contabilizados en el segundo trimestre y 9.861 en el tercero. El que comprendió los meses de octubre a diciembre alcanzó 6.196 litros y el de enero a marzo, 4.239.
Entre los contenedores que permanecieron en funcionamiento durante todo el año destaca el nivel de recogida alcanzado en el situado en la carretera de Fuente Amarga, con 4.489 litros; un volumen que sorprendentemente superó a la recogida de los existentes en los puntos limpios de Pelagatos, con 4.030 litros, y Urbisur, con 2.749 litros. Igualmente destacable fue el volumen experimentado en los puntos limpios de la carretera de Medina, con 3.297 litros, y de la barrida de El Carmen, con 3.109 litros.
Por lo que respecta a los contenedores que entraron en funcionamiento en julio, pese al menor hábito de uso que los anteriores, fueron destacables los resultados obtenidos en el existente en la carretera de La Barrosa, con 1.340 litros, y en el ubicado en la calle Pintor Valdés Leal, con 1.022 litros.
Eliminar el aceite del ciclo integral del agua es fundamental desde el punto de vista ambiental, ya que cada litro de este residuo es capaz de contaminar mil litros de agua. De la misma forma su presencia entre las aguas residuales que llegan a las estaciones depuradoras dificulta la depuración.
Una vez que son recogidos, los residuos son debidamente tratados en la planta que Verdegras, empresa encargada de su retirada, dispone en El Puerto de Santa María para su posterior conversión en biodiésel. La recogida, el transporte y el tratamiento se ejecutan a “coste cero” para el Ayuntamiento de Chiclana.