Según ha explicado hoy en rueda de prensa el alcalde de la ciudad, Pedro Rodríguez (PP), "se trata de una iniciativa que parte de una propuesta del Defensor del Onubense y que se prevé aprobar en abril como muy tarde, ofreciendo una actitud colaborada con el ciudadano en estos tiempos de crisis y buscando educar".
Por su parte, el Defensor del Onubense, Manuel Rodríguez, ha señalado que esta ordenanza recoge "las sugerencias y propuestas recibidas de los propios ciudadanos, ya que muchos de ellos se acercan a comunicar que no pueden hacer frente a las multas y proponen una alternativa para cumplir son la sanción".
Los sujetos que podrán acogerse a ella irán desde menores de 16 años, con consentimiento del tutor legal, hasta adultos de cualquier edad que voluntariamente se acojan y que no sean reincidentes, quedando excluidas las personas jurídicas y sus representantes cuando la sanción se dirija a estas personas y a los profesionales, autónomos y empleados en general sancionados durante su trabajo.
Quien desee acogerse a esta propuesta que hace el consistorio de Huelva tendrá dos posibilidades: cambiar cada treinta euros de sanción por cinco horas de trabajo en beneficio de su comunidad o bien dedicar estas horas a la participación de cursos o talleres que imparta el Ayuntamiento relacionados con el objeto de la infracción.
Las sanciones redimibles -que oscilan entre los 60 y los 12.000 euros- serán las que provengan de faltas leves y graves sancionadas económicamente de las Ordenanzas de Venta Ambulantes y Mercadillo Tradicional, Parques y Jardines, Protección Contaminación Acústica, Control y Acceso a calles peatonales, Estacionamiento e Higiene Pública, así como de las normas reguladoras del registro de animales potencialmente peligrosos y del régimen sancionador de la Ley de Tráfico y Seguridad Vial de competencia municipal.
Asimismo, el Ayuntamiento intentará que los trabajos que se presten estén relacionados con la sanción, al objeto de que se cumpla de esta manera con la función educadora.
La nueva ordenanza también prevé la existencia de un tutor responsable, tanto para los cursos como para los trabajos, que dará cuenta de la asistencia del interesado y del cumplimiento de su sanción para determinar su condonación, ya que en caso de incumplimiento volverá a aplicarse la sanción económica.