Asimismo, Ortega indica que “con esta decisión el equipo de Gobierno pone fin a una situación de agravio entre los diferentes colectivos que componen la plantilla municipal, dando respuesta a una demanda de Comisiones Obreras y de los trabajadores afectados, a los que se les va a empezar a aplicar el convenio municipal mejorando sus condiciones laborales”.
El pasado año, los trabajadores de las concesionarias municipales PAU y Sermasa pasaron a formar parte de la plantilla del Consistorio tras el abandono por parte de estas empresas de las concesiones administrativas de las eran titulares.
No obstante, para la responsable sindical “el siguiente paso para normalizar la situación laboral de estos trabajadores sería que el Ayuntamiento abonase los salarios adeudados del pasado año”.
Deuda
En este sentido, Inmaculada Ortega afirma que “el Gobierno municipal linense debería normalizar definitivamente sus relaciones con este colectivo de trabajadores, abonándoles los salarios dejados de percibir en los últimos meses en los que estuvieron bajo la responsabilidad de las concesionarias”.
Por último, la secretaria comarcal de CCOO considera que “resulta necesario dar un carpetazo definitivo al conflicto laboral que han padecido estos trabajadores y para ello es imprescindible que se les abonen los salarios adeudados, siendo estos descontados de la deuda que el municipio mantiene con PAU y Sermasa”