Francisco José Juan Rodríguez, director gerente de la sociedad municipal Limpieza Publica y Protección Ambiental (Lipasam), ha comparecido ante el Juzgado de lo Social número siete de Sevilla por la demanda formulada contra uno de los seis despidos objetivos resueltos sobre militantes del PSOE que formaban parte de la plantilla. Durante su comparecencia, el gerente de Lipasam ha negado motivos políticos en torno a estos despidos y ha defendido que la polémica conversación contenida en una grabación con una de las trabajadoras del PSOE afectada por estos despidos se encuadra en una "situación difícil". "Sólo me hablaba de política", ha argumentado.
El juzgado de lo Social número siete de Sevilla ha celebrado este martes una vista oral en torno a la demanda promovida por Augusto G.C., extrabajador de Lipasam y militante del PSOE, contra su despido como técnico de control de calidad en esta sociedad municipal mediado el mes de septiembre de 2011, poco después de el PP desembarcase en la Alcaldía del Ayuntamiento hispalense. Se trata de uno de los seis despidos objetivos promovidos entonces por Lipasam alegando causas organizativas, toda vez que los juzgados de lo Social han celebrado ya otros dos procedimientos a cuenta de las demandas formuladas por tales despidos.
En al menos uno de los juicios previos, ha sido esgrimida una grabación que revelaría supuestas instrucciones del director gerente de Lipasam para que una trabajadora afectada por estos despidos objetivos y también militante del PSOE conservase su puesto de empleo a través de dos concejales del PP.
En la conversación, grabada tres semanas antes de que esta trabajadora fuese despedida, el gerente aconseja presuntamente a esta mujer un acercamiento a dos concejales concretos del PP, Francisco Pérez y Beltrán Pérez, para conservar su puesto de empleo a cuenta de los despidos previstos entonces como consecuencia de una reestructuración. Francisco José Juan Rodríguez, en un comunicado posterior a que la grabación fuese hecha pública, ha asumido un "error" en este caso, ha negado despidos políticos en Lipasam y ha asegurado que estos seis despidos objetivos "obedecieron a causas organizativas después de comprobar que había mucha estructura y que ésta era ineficiente".
LA TRABAJADORA LE PIDIÓ "AYUDA"
Durante la vista oral celebrada este martes, de cualquier modo, el director gerente de Lipasam ha sido interrogado sobre el contenido de la mencionada grabación. En la línea de su comunicado, Francisco José Juan Rodríguez ha negado seguir directrices políticas y ha alegado que cuando conversó con esta trabajadora afrontaba "una situación muy difícil" al verse obligado a promover despidos en una empresa pública. Según ha manifestado el director gerente de Lipasam, esta trabajadora le reclamó "ayuda" al ser consciente de que figuraba entre los despidos que planeaba la empresa con motivo de su reestructuración y "ya que me hablaba tanto de política, le dije que fuera a hablar con los políticos". "Si me pide ayuda y no para de hablar de una adscripción política, que se vaya a hablar con los políticos", ha dicho Francisco José Juan Rodríguez durante esta vista oral recogida por Europa Press.
En ese sentido, ha argumentado que desconocía que la conversación estaba siendo grabada y que entendía que se trataba de una situación "dentro de la confianza normal". En paralelo, ha defendido sus "decisiones" a la hora de consumar estos seis despidos objetivos, todos ellos con efectos sobre militantes del PSOE, y ha esgrimido que a través de las medidas adoptadas desde la cúpula de Lipasam, esta sociedad municipal tiene actualmente "20 personas menos" en su plantilla como consecuencia de despidos y la no renovación de contratos temporales. La empresa, según el director gerente, estaba "sobre dimensionada" precisamente en un momento de contracción del sector público.
LIPASAM DESCARTA UNA "OPERACIÓN DE LIMPIEZA"
La representación de Augusto G.C., de otro lado, ha esgrimido que un informe elaborado por dos consultoras recomendaba la destrucción de 28 puestos de empleo y la reestructuración de Lipasam se redujo entonces a "sólo seis puestos de empleo", en este caso pertenecientes a destacados militantes del PSOE", por lo que ha reclamado la nulidad del despido, o subsidiariamente la improcedencia, bajo la premisa de que este puesto de técnico de control de calidad "no sobraba" en la empresa y que concurren numerosos "indicios" que inducen a pensar en un despido derivado de matices políticos. La representación jurídica de Lipasam, no obstante, ha negado una "operación de limpieza" política en esta sociedad municipal y ha esgrimido el testimonio de la responsable de Recursos Humanos, quien ha señalado que numerosos militantes del PSOE siguen trabajando como "encargados o jefes de servicio" en Lipasam pese al desembarco del PP en la Alcaldía de Sevilla, toda vez que incluso miembros del PP se habrían visto afectados por las reestructuraciones de la empresa.