La subsistencia a medio plazo del Centro Comercial de Bahía Sur y, por ende, de sus puestos de trabajo pasa de manera irremediable por la ampliación de más de 30.000 metros cuadrados que está proyectada para las instalaciones, pero que está pendiente de la aprobación definitiva del nuevo Plan General de Ordenación Urbana por parte de la Junta.
Ese es el primer escollo que hay que salvar, pero no el único, puesto que el otro es que la propietaria del parque comercial, es decir, Unibai Rodamco apueste por poner dinero y llevar a cabo dichas obras. Esta cuestión será tratada a primeros del próximo mes de octubre en una reunión sobre gestión en la que estarán presentes los representantes de todos los centros comerciales que han sido construidos por dicha mercantil.
Modelo obsoleto
Y es que, con el modelo actual, Bahía Sur no puede competir con el resto de grandes superficies comerciales que han ido surgiendo en los últimos años en toda la provincia de Cádiz.
Todas ellas pueden ofrecer actualmente a las grandes firmas locales de más entre 200 y 800 metros cuadrados, que es lo que están demandando, mientras que el centro comercial isleño, en este sentido, no puede hacerles la competencia. Para ello, sería necesario tirar medio centro comercial y levantarlo de nuevo, con el agravio y las molestias que podrían padecer los clientes.
Es el nuevo formato que está en el mercado y el que se pretende poner en marcha en las instalaciones isleñas en los próximos años, siempre y cuando se acometa esa ampliación por la que pasa gran parte del futuro funcionamiento de las instalaciones.
Una ampliación que, además, tendría como contrapartida la creación de alrededor de unos 500 puestos de trabajo, amén de los que se generarían en el sector de la construcción durante el desarrollo de las obras.