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Viernes 15/11/2024
 
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Huelva

El Seprona de Niebla imputa a cinco personas por delitos de caza furtiva

Se han intervenido tres escopetas y dos rifles con silenciador, además de los cadáveres de una cierva y de un jabalí

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Agentes de la Patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), con base en Niebla y pertenecientes a la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva, han procedido a la detención de 5 personas como presuntos autores de delitos contra la flora y fauna silvestre, durante las últimas dos semanas. Estos servicios se han realizado en los términos municipales de Niebla, Escacena del Campo y Berrocal.
El primero de ello se llevó a efecto el pasado día 1 de septiembre, cuando los agentes de la Guardia Civil realizaban servicios de prevención de la caza furtiva en acotados de Niebla y la Peñuela. En un paraje conocido como “El Guijillo”, observaron a lo lejos a un individuo que llevaba un arma en la mano e instantes después pudieron escuchar cómo se producía un disparo. Los integrantes de la Patrulla, media hora después de estos hechos, procedieron a interceptar a un vehículo con remolque que transitaba por la zona, hallando en el interior el cadáver de una cierva recién abatida.
Por estos hechos, los agentes imputaron a dos hombres, al que habían visto a lo lejos y al conductor del vehículo, aprehendiendo las dos escopetas que portaban, ya que ninguno de los dos poseía autorización para esta actividad cinegética. Además le fueron halladas munición prohibida.
El día 10 de septiembre, los mismos agentes sorprendieron en un coto de Escacena del Campo a un hombre que circulaba por el interior del mismo con un vehículo, por lo que procedieron a identificarle. Dentro del remolque que llevaba el coche, se encontró un jabalí muerto, al que le habían cortado la cabeza, que también se halló en el remolque. Identificado el conductor, se comprobó que carecía de autorización para cazar especies de caza mayor, imputándole como presunto autor de un delito. También se le intervino una escopeta.
Al día siguiente, 11 de septiembre, en una finca de Berrocal, los agentes se encontraban realizando una patrulla nocturna, detectando la presencia de un vehículo. Poco después, los guardias civiles escucharon lo que parecía ser el disparo de un rifle con silenciador, por lo que se dispusieron para la búsqueda del posible tirador. A la 01’30 de la mañana dieron el alto a un hombre que, acompañado de otro, llevaba el arma con el silenciador acoplado, y para sorpresa de los agentes, este individuo se giró y encañonó a los guardias civiles, por lo que éstos tuvieron que conminarles enérgicamente y a través de órdenes verbales para que depusieran la actitud. Ambos cazadores tiraron el rifle al suelo y huyeron en direcciones opuestas, aunque el que había amenazado a los agentes fue detenido instantes después y acusado de amenazas con arma de fuego y desobediencia, además del delito de caza. Sobre el otro individuo se están realizando investigaciones para su identificación.
Por último la noche del día 14 de los corrientes y de nuevo en un coto de caza de Niebla, los integrantes de esta Patrulla del SEPRONA detuvieron a un individuo que circulaba por el interior a bordo de un vehículo. Inspeccionado el coche, se halló un rifle con silenciador y munición, lo que unido a la carencia de autorización para la práctica de caza en su modalidad de aguardo nocturno ni autorización del coto, propició su detención como presunto autor de un delito de caza furtiva.
Trampas en El Granado
En relación con los servicios de protección a la fauna silvestre que se vienen realizado últimamente, los integrantes de la Patrulla del SEPRONA de Lepe, hallaron durante los días 8, 11 y 12 del presente mes, varias trampas y artes prohibidas de caza en una finca de El Granado.
Durante varias minuciosas inspecciones que se desarrollaron en esta zona, que comprende una extensión de 224 hectáreas, fueron encontradas en el campo y preparadas para cazar,  dos jaulas trampa octogonales, tres cepos, una jaula trampa de grandes dimensiones (120 centímetros de ancho, por 80 de alto y 210 de fondo) y una lanza para rematar a los animales que fueran atrapados en esta última trampa.
En todas estas actuaciones, la Guardia Civil ha instruido las correspondientes diligencias, que fueron remitidas a los Juzgados de Instrucción de Guardia Competentes.

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