La Policía Local de Sevilla ha detenido a un joven de 20 años que intentó agredir a unos agentes que trataban de identificarle, al sorprenderle en la calle Torneo actuando como 'gorrilla' o aparcacoches ilegal. El detenido, originario de Camerún, cuenta con otros cuatro arrestos a sus espaldas.
Los hechos, según informa el Ayuntamiento hispalense, ocurrieron el pasado sábado, cuando dos policías locales que patrullaban por la calle Torneo observaron a una persona ejerciendo de aparcacoches ilegal. Dado el caso, los agentes se aproximaron al joven para identificarle y formular la correspondiente denuncia. Al percatarse de la presencia policial, este joven identificado como I.T., de 20 años, emprendió la huida y fue perseguido por los agentes, que lograron localizarle cuando intentaba esconderse en un garaje de la calle Guadalete. El individuo presentó una fuerte resistencia a la detención, propinando a los agentes "patadas y puñetazos".
Una vez reducido, se comprobó que carecía de documentación, por lo que fue trasladado a dependencias policiales. Le constan cuatro detenciones anteriores, la última de ellas el pasado mes de mayo, por infringir la Ley de Extranjería y un registro de prohibición de entrada en la Delegación del Gobierno de Melilla.
El detenido, originario de Camerún, ha sido acusado además de resistencia y desobediencia a los agentes de la autoridad y ya ha sido puesto a disposición judicial.
La Policía Local de Sevilla activó el pasado 11 de octubre un protocolo específico de actuación, dentro del Plan Especial contra Gorrillas puesto en marcha a mediados del pasado mes de junio, con el objetivo de continuar avanzando en la lucha contra esta actividad.
Este protocolo detalla a los agentes toda la normativa aplicable a personas que estén ejerciendo esta actividad en las calles de Sevilla, tanto la Ordenanza para el Fomento y Garantía de la Convivencia Ciudadana en los Espacios Públicos, como el Reglamento General de Circulación, que prohíbe a los peatones transitar por lugares no autorizados, y la Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana. Asimismo, se refiere también al Código Penal, que recoge delitos contra la seguridad vial, de desobediencia a agentes de la autoridad y de amenazas, tanto graves como leves, coacción, injuria o vejación injusta.
Asimismo, señala la necesidad de que el agente tome contacto con el ciudadano afectado a una distancia prudencial para recabar la información más completa posible relacionada con el hostigamiento, coacción o amenaza y la cantidad entregada o los daños causados si se produjesen. También deberán tratar de comprobar la residencia habitual del infractor y la posibilidad de que forme parte de un grupo organizado, caso en el que se realizarán las averiguaciones oportunas para iniciar las actuaciones pertinentes.
De igual modo, el plan de actuación prevé el incremento de la presencia policial en aquellas zonas en las que se ha registrado en la fase previa que existe una mayor incidencia de este problema y recoge un procedimiento detallado de intervención para garantizar la identificación del individuo infractor y cómo actuar en el caso de que sean extranjeros. Para esto se ha establecido un protocolo en colaboración con la Brigada Provincial de Extranjería y la de Policía Científica, ambas del Cuerpo Nacional de Policía.
Concretamente, si se trata de un extracomunitario y está documentado, el Centro de Control de Policía Local comprobará si su situación en el país es o no regular para, en caso de que no lo sea, ponerlo a disposición de la Policía Nacional para que adopte las medidas que procedan. En el caso de que no sea posible identificar a esa persona por otros medios podría ser trasladado a dependencias de la Brigada Provincial de Policía Científica para su identificación.