Dos agentes de la Policía Local de San Roque se sentaron la pasada semana en el banquillo de los acusados en relación a una denuncia presentada por un grupo de cuatro personas por una supuesta agresión policial ocurrida en la Feria hace algunos años.
Según la versión de los denunciantes, la agresión se produjo tras producirse un altercado en una caseta en el que, según afirman, no estaban involucrados. Al ser sacados de la caseta por la Guardia Civil, aseguran que después sufrieron golpes por parte de los agentes locales.
Según confirmó el concejal de Seguridad, Juan Manuel Ordóñez, que acudió al juicio para mostrar su apoyo a los agentes en estos duros momentos, se les pide una pena de seis años. Ordóñez detalló que los agentes negaron en todo momento haber perpetrado dichas agresiones.
El edil confirmó que uno de los agentes tuvo que dejar de residir en el municipio por supuestas amenazas.
La vista, que se celebró entre el martes y el jueves pasado, queda pendiente de una nueva sesión el próximo 12 de noviembre.