La Concejalía de Seguridad Ciudadana, Tráfico y Transportes del Ayuntamiento de Jaén ha informado de que este pasado lunes la Policía Local se incautó de unos 1.500 kilos de naranjas procedentes de la venta ambulante ilegal, los cuales repartió entre el Centro de Transeúntes, Cáritas y el comedor de San Roque tras verificar el buen estado del alimento para ser consumido.
Los hechos ocurrieron sobre las 11,50 horas, cuando se detectó la presencia de una furgoneta que ejercía esta actividad ilícita en la calle Álamos, a la altura del mercado central de abastos de San Francisco, lo que originó algunas llamadas de algunos comerciantes de puestos fijos del mercado, que alertaron a la Policía Local sobre esta competencia desleal.
La Concejalía destaca que una patrulla de la Policía Local constató que el vendedor, que procedía de Utrera (Sevilla), no tenía tiene ningún tipo de autorización para la venta de esta mercancía, por lo que se le incautaron 500 sacos de naranjas, de tres kilos cada uno.
El concejal del área, Juan Carlos Ruiz, ha indicado que este delito "constituye una infracción administrativa a la ordenanzas municipales del comercio ambulante del Ayuntamiento de Jaén, por tanto se dispone a esta intervención cautelar y la mercancía se deposita en las dependencias del mercados de abastos de San Francisco, para que se someta a un control sanitario por parte de la inspección dependiente de la Concejalía de Consumo, Comercio, Mercados y Sanidad y para la determinación de su destino por parte de los servicios sanitarios de consumo".
De su lado, la concejal de Consumo, Comercio, Mercados y Sanidad, Victoria Garvín, ha señalado que, desde su Concejalía, "los inspectores sanitarios procedieron al control sanitario de esta mercancía, ya que carecía de etiqueta de procedencia y tras verificar su buen estado para ser consumidas y al ser productos perecederos, se determina que sean repartidas entre el Centro de Transeúntes, Cáritas y el comedor de San Roque".