A pesar de estar a la cabeza del Ministerio de Empleo, la ministra Fátima Báñez no es capaz de meter en cintura ni a sus propios familiares. Prueba de ello es que una empresa gestionada por parientes cercanos de la popular lleva más de un año sin hacer frente a sus obligaciones con sus trabajadores, a los que adeuda las nóminas de más de 12 meses.
Así lo ha denunciado este martes CCOO en un comunicado, en el que se refiere a Carnes Báñez SAU, empresa de productos cárnicos con sede en San Juan del Puerto, localidad natal de la ministra de Empleo.
El sindicato ha lamentado las “situaciones realmente dramáticas que están viviendo estas siete familias que llevan esperando sus sueldos desde hace más de un año”.
Por eso, a partir de hoy se concentrarán cada día a las puertas de la factoría “hasta que la empresa asuma sus responsabilidades”, explica Manuel Salas, secretario general del sindicato provincial de Comercio, Hostelería y Turismo de CCOO Huelva.
Carnes Báñez SAU, en proceso de liquidación, está participada al cien por cien por la Familia Báñez Toronjo SL, gestionada por Antonio Báñez González, hermano del difunto padre de la ministra y hasta marzo de 2012 administrador único de la empresa, y familia.
El sindicato denuncia que las reivindicaciones de los trabajadores se centran en la deuda que la empresa adquirió con ellos “cuando dejó de pagar los salarios para un año después iniciar un concurso de acreedores, que provocaría la extinción del contrato de toda la plantilla, pero sin haber asumido la deuda correspondiente”.
Según ha explicado Salas, “desde entonces, Carnes Báñez ha hecho todo lo posible por dilatar el proceso, hasta el punto de que el juicio, señalado para el 11 de diciembre de 2012, tuvo que suspenderse por no haber comunicado la empresa al juzgado correspondiente la existencia de un administrador concursal, lo cual unido a otras maniobras, está dilatando de forma inusual un proceso que debería estar resuelto hace mucho tiempo”.
Sin embargo, la empresa lo ve de otra manera, ya que según ha explicado en un comunicado, la sociedad fue declarada en concurso voluntario de acreedores el pasado 27 de septiembre de 2012, siendo encarga la administración de la compañía por el Juzgado de lo Mercantil de Huelva a un administrador concursal, responsable de la misma desde la fecha en que aceptó el cargo.
Por tanto, remarcan que el pago de los créditos salariales “se efectuará conforme a la legislación concursal vigente, dentro del procedimiento concursal, sin que en modo alguno pueda intervenir la accionista única de esta sociedad”. No obstante, no aclaran por qué no se ha efectuado pago alguno hasta el 27 de septiembre, cuando la responsabilidad recaía aún en la empresa y no en el administrador concursal.
Puntualización
De otro lado, Carnes Báñez también ha querido dejar muy claro que ni en esta sociedad ni en su administradora, Familia Báñez Toronjo, “participa como socio o accionista ni la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, ni su padre, ni sus hermanos”, es decir, que “ni la ministra ni sus familiares directos son propietarios de la compañía”.
Donde sí tiene participaciones la ministra onubense es en la sociedad familiar Grupo Báñez García, un consorcio empresarial propiedad de la madre de Báñez, ella misma y sus hermanos, y con sede en Huelva. El grupo está formado por las empresas Construcciones Robles, con una deuda millonaria en créditos bancarios e investigada en la trama de los ERE; Jabugo de Ley, Dehesa el Guijarral y Giersa.
