El Ayuntamiento de Huelva presumía, a finales de 2007, de incorporar a la flota de autobuses de Emtusa un novedoso canal informativo a través de pantallas instaladas en el interior de los vehículos con información a tiempo real. La adjudicación de este servicio a la empresa Spotlive no estuvo exenta de polémica y generó el rechazo de toda la oposición.
Cinco años después, lo único cierto es que esta empresa que presumía de ofrecer un sistema único y pionero sólo pudo cubrir este servicio durante un año y dejó al Ayuntamiento una deuda de 18.800 euros que hasta la fecha no se había reclamado. Además, la jugada le puede costar algo más al Ayuntamiento, ya que ahora la empresa pretende desmantelar sus equipos de los autobuses, y para evitarlo, el Consistorio ha hecho una propuesta de compra de dichos equipos, que se presentó en el pasado Consejo de Administración de Emtusa del mes de enero.
La adjudicación del contrato de la publicidad interior de los autobuses de Emtusa se designó ‘a dedo’ a la empresa Spotlive bajo el argumento de que era la única que, en esa fecha, ofrecía información a tiempo real a través de sus pantallas. Sin embargo, pese a contar con un sistema único, la empresa se constituyó a la par que se adjudicaba el contrato. Así, si la adjudicación se realizó en marzo de 2007, Spotlive se constituyó sólo un mes antes, el 20 de febrero de 2007, y unos días antes de sus constitución ya existía un informe de un técnico municipal que avalaba el servicio prestado por la empresa.
Estas sombras en la adjudicación, negadas por el equipo de Gobierno pero muy cuestionadas por la oposición -PSOE y PP-, que acusó al Ayuntamiento de “falta de transparencia”, centraron el debate de varios plenos a principios de 2008, se pidió una comisión de investigación que fue denegada y el asunto quedó, como tantos otros, en un segundo plano hasta que de nuevo ha saltado a la palestra en el Consejo de Administración de Emtusa.
Son muchas las dudas que se plantean ahora. La primera, el poco recorrido que ha tenido la empresa y la deuda generada en un año de servicio. Así, en el informe emitido por el todavía gerente de Emtusa, José María Benjumea, explica que “la actividad de la empresa, una vez superado el plazo de montaje de los equipos, comenzó a primeros de 2008, desarrollándose durante todo el año”, pero “por circunstancias diversas, tuvo que ser suspendida dicha actividad a últimos del mismo año”. Durante ese año se generó una deuda de 18.848, 32 euros, aún “pendiente de pago”, a pesar de la difícil situación que atraviesa la empresa.
Operación
Durante este tiempo, el Ayuntamiento ha hecho uso de los equipos instalados, con la autorización de Spotlive, que ahora, tras “no haber podido continuar con su actividad publicitaria”, quiere retirarlos de los vehículos.
La propuesta de Emtusa pasa por la compra de los equipos informáticos, valorados en 36.024 euros, a los que restaría la deuda contraída, y cree que es lo más beneficioso porque “esta empresa se encuentra dada de baja y no se podría proceder a dicho cobro por insolvencia”.
De llevarse a efecto la compra, Spotlive, a pesar de haber prestado un servicio durante sólo un año y haber generado una deuda no pagada con Emtusa, recibiría 17.150,68 euros por los equipos.