El Blusen Monbus cumplió los pronósticos en San Sebastián, en donde ha afianzado sus serias opciones de estar en los play off de la Liga Endesa, y condena al Lagun Aro GBC a penar en las tres últimas jornadas en la que será su segunda despedida de la ACB en la última década.
El equipo guipuzcoano, como de costumbre, salió frío y los gallegos aprovecharon la ocasión para tomar la iniciativa con un buen Corbacho como el mejor de su equipo en el primer cuarto.
Los americanos del Lagun Aro, claves en el devenir de los partidos cuando tienen su día, se mostraron muy concentrados, y tanto Woods como Finley sujetaron el marcador primero y protagonizaron junto a Doblas la reacción en el segundo cuarto.
Una canasta de Rubio en el minuto 13 estableció el 20-19, génesis del despegue progresivo de los vascos en el luminoso que tomaron durante muchos minutos el timón del choque.
Woods cogió la iniciativa y con cinco puntos suyos dio el primer aviso de ese vuelo que los donostiarras querían iniciar, abortado al principio por Corbacho, y en los instantes finales de la primera parte una intensa defensa permitió a Lagun Aro marcharse nueve arriba al descanso.
Blusens Monbus no había venido de turismo y sabedor de que muchas opciones de clasificación para el play off pasaban por ganar en San Sebastián volvió a la pista con el mono de trabajo para descontar en un abrir y cerrar de ojos las diferencias y dejarlas en su mínima expresión (41-39) con un triple su base Rodríguez.
El aro se empezó a hacer pequeño para los de Sito Alonso a los que les empezó a pesar la presión por tantos partidos que se les han ido en los últimos minutos, entre ellos el de su última comparecencia en casa contra Cajasol, sobre todo cuando estableció el 58-60 Hummel que volvió a poner por delante a Obradoiro mucho tiempo después.
Con 69-69 entró el partido en sus dos últimos minutos, Valladolid y Fuenlabrada ganaban sus encuentros y una derrota local equivalía el descenso de un Lagun Aro que se aferró con fuerza a sus mínimas opciones de supervivencia en ACB para prorrogar un poco más su agonía.
Una canasta de Dewar ante Doblas vendido por las personales dio dos puntos de ventaja a Blusens (69-71) y, a pesar del esfuerzo final de los donostiarras, Lagun Aro terminó nadando para morir en la orilla y decir adiós a su segunda etapa en la máxima categoría del baloncesto español.