El sindicato CTA ha criticado este lunes que hay empresarios agrícolas del sector de la cebolla, que está ahora en plena recolección en la zona de Palma del Río (Córdoba), que están empleando a trabajadores inmigrantes extracomunitarios sin respetar lo estipulado en el convenio colectivo del campo, mientras que jornaleros nacionales, que no aceptan cobrar por debajo de lo recogido en el convenio, se han negado a trabajar.
Así, según ha informado CTA, este mismo lunes "cuatro cuadrillas se han negado a trabajar en una finca de Palma del Río, puesto que el patrón no les paga lo estipulado en el convenio colectivo", es más, "impone el tabajo a destajo a cuatro pesetas el kilo".
Además de en esta finca, a la salida de Palmaera, "también en otras, ya en la provincia de Sevilla y de forma alternativa, puesto que unos días los llevan a unas fincas y otros a otras, con el objeto de que no se les puedan localizar", estos empresarios agrícolas "tienen trabajando a ciudadanos extracomunitarios, en concreto paquistaníes, por supuesto fuera de lo que se establece en el convenio colectivo", según se ha asegurado desde CTA.
Para este sindicato, resulta evidente que, "con 6.200.000 parados, España es un país que no demanda mano de obra, todo lo contrario exporta en estos momentos mano de obra, con lo que no tiene sentido que no puedan trabajar los trabajadores de la comarca del Bajo Guadalquivir y que existan mafias que, a través de empresas de trabajo temporal, contraten a trabajadores de otros países que se ven obligados a soportar las vejaciones que los patronos quieren y por supuesto a trabajar por debajo del convenio".
Es más, "aunque alguien pueda pensar lo contrario, los caciques no se han terminado en Andalucía, todo lo contrario, están más fuertes que nunca y amparados por la impunidad legal de todos los obstáculos que las inspecciones de trabajo tienen que pasar para poder sancionarles".
Por eso, CTA ha hecho un llamamiento a las autoridades públicas para que, "de forma eficaz, tomen cartas en el asunto e intenten resolver el problema que de forma muy generalizada está creando la patronal agraria en la Vega del Guadalquivir".