Las estructuras del Club Baloncesto Sevilla van camino de sufrir cambios importantes en diversas parcelas dentro del marco de su fisionomía profesional.
Una de ellas, la primera y más relevante, se ha producido en la presidencia de la entidad. Juan Carlos Ollero, que encara en breve su jubilación profesional, cesa en el cargo tras ochos años de mandato y ocupará su lugar José Aguilar, ex consejero del club, y socio y accionista desde la fundación en el año 1987.
Aguilar, de profesión empleado de banca, recoge una institución en la máxima categoría del baloncesto nacional; si bien tendrá que lidiar con pocos recursos económicos son escasos y la responsabilidad en esta tesitura de conformar un bloque de jugadores con garantías a disposición de un técnico ( a día de hoy Aíto sigue siendo una incógnita a resolver) que le saque el mayor partido.
El nuevo mandatario hacía la siguiente reflexión: "No parto de cero, aunque habrá que trabajar mucho. Los plazos ineludibles los cumpliremos y estoy convencido de que llegaremos a la pretemporada con el equipo hecho”.
Ollero, en su agradecida despedida, reveló un dato interesante: "Seguimos el plan previsto con Aíto. Hay aspectos a discutir. El plazo marcado, el 30 de junio”, concluía.