Relajación y bienestar. Esto es lo que supone, en líneas generales, el programa de ayuda al baño y fisioterapia en el mar que, un año más, y ya éste es el noveno, desarrolla la asociación La Gaviota.
Un programa del que se benefician más de una centena de usuarios, entre particulares y de otras asociaciones, y que este año ha contado con un presupuesto menor que en ediciones anteriores por parte del Ayuntamiento de El Puerto. Sin embargo, y a pesar de ello, esta ayuda, que es de 6.000 euros, “supone que muchas personas discapacitadas pueden disfrutar del baño en la playa”, tal y como ha señalado la presidenta de la asociación, María del Carmen Molina. Y es que, una vez más, el programa no se circunscribe exclusivamente a la atención de los socios de la organización, ni de los portuenses en general, sino que a lo largo de estos veranos, ha sido concebido para atender al mayor número de personas posibles, con independencia de su residencia. En este sentido, desde La Gaviota afirman que no sólo se acercan hasta las infraestructuras disponibles para tal fin personas discapacitadas de Cáceres o Badajoz, sino que la asociación cuenta con algunos socios del extranjero. “Tenemos a una persona que viene de Alemania, que nos pidió la terapia y que está muy contento de poder realizar esta actividad cada año”, apunta Molina.
Además, todo ello en un marco como es la playa de Valdelagrana que, tal y como ha especificado el concejal de Policía Local y Protección Civil, Carlos Coronado, “reúne las condiciones idóneas para realizar este tipo de actividades”. Un proyecto en el que resulta también fundamental la coordinación con los agentes de esta área, así como los socorristas que velan por la seguridad de las playas. Igualmente, y desde Protección Civil se coordinan los servicios entre el transporte sanitario y el servicio en la playa, para garantizar la seguridad y buena recepción de los usuarios.
En lo que se refiere al programa en sí, éste se ajusta a las necesidades de cada persona. De esta forma, se desarrollan actividades estrictamente orientadas al ocio (baño, acompañamiento, etc.) y otras que requieren una atención más especializada, como por ejemplo las que tocan aspectos tales como la flexibilidad, la resistencia cardiovascular y respiratoria o el tono muscular. “Las actividades dependen de la discapacidad, y se hace desde relajación dentro del agua, ejercicios de fortalecimiento dentro del agua, de equilibrio para personas mayores… aunque todo depende del estado físico de cada persona y depende, igualmente, de sus necesidades”, ha apuntado el fisioterapeuta, Antonio Castejón. Para este tipo de actuaciones, la asociación cuenta con material específico como las sillas anfibias que facilitan el desarrollo de las mismas.
La disposición del personal también es esencial para que se ejecute el programa. Este año, y en función de la capacidad económica, La Gaviota cuenta con un fisioterapeuta, un auxiliar y un grupo de cuatro voluntarios que se encargan de organizar, preparar y dirigir las actividades, de lunes a viernes, de 10.30 a 15.00 horas. “El año pasado, por ejemplo, no hubo inversión pero para no perder el baño se tenía a los auxiliares, aunque no se hicieran las terapias”, ha comentado el fisioterapeuta.
Unas terapias que les proporcionan a las personas con discapacidad “una ayuda física y psicológica y hace que, aunque sean pocos días, cuando lleguen a casa estas personas se sientan más descansadas”, ha indicado la presidenta de La Gaviota.
Entre las precauciones que se toman, las habituales al acudir a la playa, especialmente, el oleaje y la hipotermia. “Tenemos que tener cuidado cuando hay poniente, porque el mar está más revuelto de lo normal y también si los días están fríos, porque no podemos tener a una persona mayor mucho tiempo dentro del agua”, ha especificado Antonio Castejón.
Igualmente, desde La Gaviota y otras asociaciones participantes en el programa han mostrado sus inquietudes y reivindicaciones sobre las instalaciones a la responsable del área de Medio Ambiente, Marta Rodríguez, que ha afirmado que “los recursos son los que son, aunque, en la medida de nuestras posibilidades, se irán mejorando año tras año”.
Los más de 100 usuarios que un año más volverán a beneficiarse de la terapia Hidrosport en la playa de Valdelagrana podrán hacerlo hasta inicios del próximo mes de septiembre.
