La Junta de Gobierno local, a propuesta de la delegada municipal de Servicios Sociales, Ana María Bertón, ha aprobado hoy prorrogar el convenio que el Ayuntamiento de Chiclana mantiene con la Consejería de Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía por la que se regula las ayudas económicas familiares y que tiene un valor de 31.054, 11 euros. De esta cantidad, el consistorio chiclanero aporta 19.430,48 euros, mientras que la consejería destina 11.623,63 euros.
De esta forma, el Ayuntamiento de Chiclana se acoge a la Orden de 13 de abril de 1998 de la entonces Consejería de Asuntos sociales respecto las Ayudas Económicas Familiares y en relación a las disposiciones por las que se regula la cooperación con las diputaciones provinciales y los ayuntamientos de municipios con población superior a los 20.000 habitantes pertenecientes a la comunidad autónoma de Andalucía en materia de servicios Sociales.
Cabe recordar que, al margen de este convenio, el consistorio chiclanero destinó en 2012 a ayudas económicas familiares un total de 641.410,91, una cantidad que supuso más del doble que en los dos años precedentes. Sobre estos datos, Bertón declaró que “esta cifra no es más que la demostración fehaciente de la política firme que mantiene este equipo de gobierno de apoyo a las familias chiclaneras que se encuentran actualmente atravesando serias dificultades económicas”.
La concejala ha añadido que “para este año 2013, hemos dedicado un presupuesto similar y, en todo caso ampliable, para cubrir las necesidades de todas aquellas familias chiclaneras con hijos a su cargo y que cumplen con los requisitos propuestos por Servicios Sociales para acceder a estas ayudas”.
Ayudas económicas familiares
Las ayudas económicas familiares son aquellas que están destinadas a las unidades de familia que tienen menores a su cargo. Se engloban aquellas relativas a la adquisición de alimentos, ayudas al pago del alquiler o de facturas de suministro eléctrico o de agua corriente. Mención especial merecen las ayudas aquí incluidas a financiar la adquisición de productos infantiles y de higiene.
Estas prestaciones municipales se destinan a aquellas unidades familiares cuyos recursos económicos son insuficientes para cubrir sus necesidades básicas y se acceden a ellas, bajo criterio técnico, y durante todo el año. Se encuentran reguladas por una Orden de 13 de abril de 1998 y pueden ser temporales, dinerarias o en especie, de carácter preventivo, que se conceden a familias para atención de las necesidades básicas de menores a su cargo cuando carecen de recursos socioeconómicos suficientes para ello.