Primeros pasos para la esperada metamorfosis que después de seis años al fin empieza a fraguarse en los edificios de Infantil y de Primaria (separados ambos por una carretera) del colegio público Antonio Machado, en la avenida San Joaquín. Los operarios de la empresa Easy 2000 S.L, que fue la que se llevó el gato al agua de las casi 100 entidades que pujaron en el concurso para hacerse con la obra pública la presentar una oferta de 2,1 millones, llevan desde la primera semana de agosto trabajando sobre el terreno, acotando la zona de Infantil. A medida que avancen las semanas la actividad será mayor y más aparatosa, ya que no hay que perder de vista que el plazo estimado de estos trabajos, que darán empleo hasta a 40 trabajadores, es de 12 meses y 18 días. Un año en el que tanto escolares como los propios vecinos de la zona deberán armarse de paciencia al tener que soportar los inconvenientes que suponen una actuación de esta envergadura que pondrá fin a los problemas de espacio por el que padres y alumnos han protagonizado una de las ofensivas de más peso en el último curso y que para el que empieza les ha dejado con una clase menos de Infantil.
En el AMPA, su presidenta Jenni Chernichero sabe que vienen momentos de “calma y de aguantar” y que la “incomodidad” de este próximo año es el paso previo para que en el 2015 “los niños estén como reyes”. Y es que además de con el ruido, tanto profesorado, como escolares y vecinos de la zona tendrán que convivir con los obreros y las molestias que conlleva uno de los proyectos de ampliación de más envergadura que llevará a cabo la Junta de Andalucía en la provincia, al que también hay que sumar el del CEIP La Marquesa, en esta caso con la mitad del presupuesto que el centro de San Joaquín.
Una de las fases más complicadas es la construcción de una segunda planta en el edificio de Primaria, actuación que se ejecutará presumiblemente en las próximas vacaciones de Navidades, que será la época en la que la empresa aprovechará la ausencia de los estudiantes para acometer los trabajos que son incompatible con su presencia en clase.
una fisonomía nueva
Este colegio, compuesto actualmente por dos edificios situados en parcelas separadas, verá alterado completamente su fisonomía, ampliándose y reformándose para su adaptación a la tipología C3, (como viene ejerciendo ya desde hace varios cursos, de ahí sus problemas de espacio, lo que le ha obligado a sacrificar aulas como la biblioteca o el gimnasio para dar clases), por lo que a la finalización de la actuación tendrá capacidad para 675 alumnos y alumnas.
La obra permitirá, además, la retirada de seis aulas prefabricadas que actualmente están en uso en el centro, otra de las quejas que más se han repetido en estos años por parte de los padres, que alertaban de que las caracolas, como se las conoce popularmente estaban invadiendo el patio de sus hijos, dándose casos en los que algunas clases de apoyo tenían que prestarse en el pasillo por las limitaciones de aulas.
Tal como detalló la Junta en un comunicado cuando dio a conocer la adjudicación de los trabajos, en la parcela de Infantil se realizará una redistribución interior del aula polivalente para obtener dos aulas y se redistribuirá un aula de Infantil para convertirla en un nuevo espacio común. Asimismo, se redistribuirá otra aula para convertirla en almacén y se ejecutarán de nueva obra dos clases de Infantil, un comedor de 250 metros cuadrados con cocina para servicio de catering -actualmente los pequeños tienen que cruzar la calle con monitores para ir al comedor del edificio de Infantil cada día- y aseos para profesorado y alumnado. También en esta zona del centro se construirá una pista deportiva que, al igual que el comedor, será de uso compartido con el alumnado de Primaria.
En la parcela de Primaria se intervendrá en las seis aulas y aseos de la planta baja y se construirán salas de usos múltiples y profesorado, despachos para dirección y jefatura de estudios, secretaría, consejería, sala para la asociación de madres y padres, aseos, almacén, cuarto de instalaciones, porches cubiertos y un gimnasio", recoge la nota.
En la planta primera se intervendrá en las seis aulas de segundo ciclo de Primaria y se crearán seis aulas de tercer ciclo de primaria, seis aulas de pequeño grupo, biblioteca, aulas de informática y música, sala de recursos, aseos para alumnado y cuartos para instalaciones y limpieza.
Después de llegar a dar clases “reivindicativas” en la calle, delante de la puerta del colegio, llevar a sus hijos con chalecos antirreflectantes a clase o cortar carreteras, al fin las decenas de familias de este colegio público va a ver recompensados sus esfuerzos. Ahora sólo les queda cruzar los dedos para que las obras avancen a buen ritmo y no se encuentren con ningún obstáculo más en el camino.
