La falta de grados de la uva motivada en buena medida por la bajada de temperaturas de la pasada semana ha obligado a paralizar la vendimia en varios lagares del Marco de Jerez tras detectar que no tenían los 10,5 grados baumé que establece el Consejo Regulador de Vinos para su recolección. Es lo que ha ocurrido en los lagares de la cooperativa jerezana de Las Angustias, de Sánchez Romate, además de en varios puntos de la Costa Noroeste, como en Trebujena, y lagares de Bodegas Hidalgo La Gitana de Sanlúcar, mientras que desde el sector apuntan a que en otras zonas la actividad se mantiene aunque el nivel de concentración de la azúcar sigue estando “muy justo”.
Lo ocurrido,a lo que en el Consejo Regulador no dan demasiada importancia y valoran como un tema “puntual” con vistas a que en los “próximos días” se puedan retomar las labores, responde cuanto menos a una situación con pocos precedentes en el Marco, tal y como señala Francisco Guerrero, de Asaja. “Está ocurriendo algo muy raro porque se ha empezado con grados y se han ido con el tiempo fresco que ha hecho. También hay que decir que la viña es muy sabia y la uva no estaba madura, estaba dispareja, había racimos maduros y otros que no. El que hubiera días de tanto calor hizo que subieran los grados y luego ha venido el tiempo fresco, con lo que la uva ha engordado pero no está en su punto”, explica.
No obstante en el sector son optimistas y esperan que a partir de este mismo lunes pueda reanudarse la actividad en las zonas afectadas, teniendo en cuenta el nuevo ascenso de temperaturas del fin de semana y que las previsiones de las siguientes jornadas seguirán en esta tónica. Desde Asaja no temen porque estas circunstancias atípicas influyan en la producción final, si bien creen que podría restar “algunos kilos” sobre las previsiones iniciales de una campaña que se encuentra en pleno ecuador en buena parte del Marco y para la que se prevé un incremento en la producción respecto a 2012 de casi un 30%.
25 litros de agua en Trebujena
Más problemas se han presentado estos últimos días en Trebujena por los 25 litros de agua que cayeron el viernes, lo que dejó impracticable el campo y con nulas posibilidades para que entraran los tractores, mientras que en Jerez las pocas gotas que han caído no ha afectado al ritmo de la vendimia.
En Sanlúcar, hasta ahora además de La Gitana, que ha tenido que parar, han comenzado la Cooperativa Vitivinícola Sanluqueña (Covisan)y para el próximo lunes se espera que continúen cortando la uva y que se sume también la otra cooperativa del municipio, Virgen de la Caridad. No obstante, el condicionante de la falta de graduación también empieza a pesar, aunque el calor de estos días tiene todos los visos de haberlo compensado.
De hecho, en Covisan este fin de semana aún no tenían claro si suspender o continuar la recogida de uva mañana lunes. La Cooperativa Vitivinícola Sanluqueña inició la vendimia el pasado jueves con la recogida de 250.000 kilos de uva que registraba los 10,5 grados “justos”, según explicaba su presidente, Antonio Palacios, a este medio. “Vamos a realizar el pie de cuba con lo recogido entre jueves y viernes y en función de cómo fermenten los mostos decidiremos la continuación del corte de uva para el lunes”, explica Palacios. El censo de viñas del Consejo Regulador registra actualmente una superficie de unas 7.000 hectáreas en producción, en las que se estima obtener una cosecha de uva de aproximadamente unos 60 millones de kilos, en una nueva campaña en la que la mecanización supone el 70% del total de la superficie del Marco vendimiada.