El delegado de la Junta en Cádiz, Fernando López Gil, ha asegurado que entiende que la "frustración" de los trabajadores de un sector "estratégico" para la provincia de Cádiz, como es el naval, les lleve a protagonizar este jueves una manifestación --que partirá desde las tres factorías de Navantia en la Bahía hasta confluir en la capital gaditana-- porque, según ha apuntado, llevan "meses" esperando que el Gobierno de España "cumpla sus promesas" en relación a la carga de trabajo.
En declaraciones a los periodistas, López Gil ha sostenido que en la provincia gaditana tiene "un enorme impacto" el desempleo en los sectores de la construcción e industria, "fundamentalmente del metal"; subrayando la "drástica reducción" de empleos directos en la rama naval e indirectos de las empresas auxiliares. Al hilo, ha recordado que en el espacio de "tres o cuatro años" se ha reducido el número de trabajadores de 15.000 a los "casi 2.500" de la actualidad.
A su juicio, la solución pasa "porque el Gobierno entendiera que hay que dar carga de trabajo a los astilleros, porque supondría la creación inmediata de empleo para situarnos como en años anteriores", lo que sería, según ha añadido, "la mejor noticia para la provincia".
"Entendemos que esas personas que durante años han sido el sector estratégico, y que prácticamente sostenían la economía de Cádiz, mañana reivindiquen a las distintas administraciones soluciones inmediatas, porque llevan meses esperando del Gobierno de España carga de trabajo directa. Tienen promesas cada cierto tiempo de que llegará algo y nunca se cumple, así que su frustración cada vez es peor", opina el delegado.
Lo demás, "como buscar excusas como los sueldos de los trabajadores", supone a su entender que se está tratando de "desviar la atención del punto real al que mirar" y así, ha reclamado al Ejecutivo Central que "inmediatamente busque esa carga de trabajo que requiere los astilleros", ya sea desde la inversión "directa" desde los presupuestos para construir los BAM o "cumpliendo esos contratos que nunca llegan como los gaseros o los contratos con Australia y Venezuela, que están pendientes de una solución definitiva".
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