Una nave de propiedad municipal en el Polígono Rematacaudales alberga el laboratorio farmacéutico de la empresa sanluqueña Sanasur. Tres profesionales de distintos ámbitos se unieron hace dos años y medio para dar cuerpo a esta empresa, que basa su sistema de trabajo en ofrecer productos de cosmética y cuidado corporal de máxima calidad elaborados con ingredientes naturales. Así nacieron los laboratorios Sanasur, una empresa que en la actualidad emplea a ocho personas y que ha conseguido ampliar su cartera de productos a una treintena de referencias.
La farmacéutica sanluqueña acaba de obtener el premio Andalucía Emprende de la Junta de Andalucía a la consolidación empresarial. El modelo de empresa que los fundadores de Sanasur han puesto en marcha es el que defiende la Administración autonómica en su apuesta por sectores innovadores que logren diversificar la industria de la provincia y que generen empleo. Por este motivo y tras su participación en la última edición de Exposanlúcar, esta semana el alcalde de la ciudad, Víctor Mora, acompañado por el delegado municipal de Fomento, Juan Marín, han realizado una visita a las instalaciones para conocer de cerca el modo de trabajo.
El regidor recorrió las instalaciones junto a dos de los socios de esta firma, Alfredo Portilla y Antonio Romero, quienes explicaron paso a paso el proceso que se lleva a cabo en el laboratorio para la elaboración de los productos de cosmética y cuidado corporal que preparan. Sanasur Laboratorios Naturales, promovido por los dos empresarios citados junto a Juan Manuel Ibáñez, comenzó a trabajar en 2010 con nueve productos y en la actualidad son ya más de treinta las referencias que tienen en el mercado, de venta en farmacias y parafarmacias a través de una red comercial que ahora se ha planteado como reto su salida al mercado exterior.
El laboratorio en el que trabaja la plantilla de ocho personas cuenta con 240 metros cuadrados, en el que se realizó una inversión de alrededor de 600 000 euros. Una de las peculiaridades de este laboratorio es que la maquinaria ha sido diseñada a medida para los objetivos de estos empresarios, de ahí que puedan plantearse tanto la fabricación en serie de unas 5.000 unidades de champú como una edición limitada de 30 ejemplares de crema para un determinado cliente que quiera personalizar sus productos bajo su propia marca.
Los productos los comercializan en farmacias, hasta el momento en el mercado nacional, siendo fácil encontrar sus cremas y lociones en muchas de las farmacias de la ciudad. Su última novedad ha sido crear la línea Sanasur Baby, dirigida al cuidado de los bebés y ya tienen en mente ampliar su oferta de productos conforme a las demandas de los clientes si bien son conscientes de que están en un mercado en el que existe mucha competencia.
Sus mejores comerciales son sus propios clientes y así han conseguido, por ejemplo, entrar a distribuir sus productos en la capital de España. “Algunos veraneantes de Madrid que eligen esta zona para descansar en verano habían probado nuestros productos y al llegar a Madrid los pedían en sus farmacias. Así pudimos entrar en un mercado que se nos había resistido hasta la fecha”. Además, también están trabajando con Cecofar, una de las principales cooperativa farmacéutica que opera a nivel nacional.
La utilización de productos naturales de la zona es una de las máximas que defiende esta empresa. De hecho, uno de los productos por el que han apostado es el champú elaborado con vinagre de Jerez. Su producto lleva incluso el logo del Consejo Regulador del Jerez. También utilizan los ostiones de las playas sanluqueñas para fabricar otros productos de la línea de cosmética. La apuesta por la calidad y el cuidado al máximo del producto, que elaboran en máximas condiciones de higiene, les ha llevado a ganarse el reconocimiento del cliente, lo que les ha permitido consolidar su iniciativa empresarial.