El teniente general jienense Alfonso de la Rosa Morena recibió la Medalla de Oro de la ciudad y el título de Hijo Predilecto en un acto emotivo que llenó el patio de butacas del teatro Infanta Leonor la tarde de ayer.
El alcalde de la ciudad, José Enrique Fernández de Moya, fue el encargado de hacerle entrega, en nombre de la ciudad, del reconocimiento, que el homenajeado agradeció con palabras de sentimiento mutuo hacia una ciudad y su gente que “siempre” le han demostrado su apoyo.
El 14 de julio de 2011 la junta directiva del Círculo de Amigos de las Fuerzas Armadas solicitó al Ayuntamiento el trámite para la concesión del reconocimiento y finalmente fue aprobada por unanimidad el pasado 27 de septiembre. “Es el reconocimiento oficial del afecto que siempre me ha manifestado Jaén y su gente. Siempre lo he sentido así. Hoy Jaén reconoce a la milicia”, valoró De la Rosa.
En sus 42 años de servicio, el teniente general recordó su infancia y adolescencia en Jaén, sus maestros de Maristas, sus primeros 20 años de servicio militar unidos a esta provincia y otros muchos en escenarios distantes y fuera de España; agradeció el papel de su familia, de su mujer Beatriz y de sus cuatro hijos, con los que ha compaginado su vida militar y familiar, y a los que dedicó el reconocimiento.
El teniente general De la Rosa Morena agradeció a los Amigos de las Fuerzas Armadas el esfuerzo que hacen por acercar la profesión militar a la sociedad con múltiples actividades divulgativas y públicas, sobre todo a los más jóvenes, ya que el homenajeado lamentó que es una de las profesiones menos demandadas por éstos, “bien porque requiere demasiadas exigencias o por desconocimiento general de la misma”. De ahí que los animara a seguir por ese camino, el de involucrar a la sociedad con las Fuerzas Armadas, que en Jaén siempre han recogido apoyo y afecto.
Como director del Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional, el teniente general hizo un alegato a la inversión en Educación, que es una “inversión en el futuro” y agradeció la colaboración de instituciones como la Universidad, que trabajan en acercar las Fuerzas Armadas a los estudiantes.
Parafraseando a Calderón de la Barca, cuyos versos guiaron su discurso de agradecimiento, el teniente general aseguró que “la milicia no es más que una religión de hombres honrados” y dedicó el homenaje a los militares.
Tras un cariñoso y largo aplauso, tomó la palabra el alcalde de la ciudad, que defendió la trayectoria profesional del teniente general Alfonso de la Rosa, del que destacó que “siempre ha llevado a gala el nombre de Jaén y el sentimiento de ser jienense”.
Lo reconoció como “merecedor del máximo reconocimiento de una ciudad a una persona”.
