“¡Menos grabar y más derrumbar!” Uno de los chicos que vio llegar al equipo de Viva Huelva, acompañado por vecinos del Torrejón, repitió ese grito en varias ocasiones, demostrando así su hartazgo de tener como vecino un edificio en desuso y cuya única utilidad, de unos años a esta parte, es ser un vertedero en plena calle, una vieja guardería convertida en guarida de las ruinas... Las ruinas de la vergüenza.
Se trata del edificio y parcela de lo que fue hasta julio de 2004 el centro de preescolar ‘Andalucía’, en la calle Alhelí de la barriada del Torrejón. Está situado entre el depósito de agua del barrio y la trasera del centro de salud. Su imagen se resume en basura, basura y más basura. Un foco de infección. Un lugar indigno. Una estampa tercermundista.
El Ayuntamiento explica
Viva Huelva hace las gestiones pertinentes para saber a quién pertenece ese espacio que en su día tuvo una utilidad social y que en la actualidad es una auténtica inutilidad.
Desde el Ayuntamiento, las fuentes municipales que atienden a este periódico explican que los terrenos pertenecen a la Junta de Andalucía, y que desde el Consistorio se ha hecho todo lo posible para que la administración autonómica adecente el lugar.
Así, estas fuentes detallaron que en 2007 se abrió un expediente de disciplina urbanística con el que se instaba a la Junta a actuar en la zona. Entonces, lo hicieron. Pero desde entonces, la mierda se ha ido acumulando sin más. Según la voz del Ayuntamiento para esta información, en abril de 2012 se llevó a cabo una orden de ejecución para limpieza, cierre de huecos y vallado de la zona, y ante la desatención de la Junta al requerimiento se procedió a poner una multa coercitiva de 1.022 euros. “Podemos llegar hasta las diez multas si siguen sin limpiar”, matizaron.
Pasa el tiempo, y en mayo de 2013 se vuelve a dar un nuevo aviso a la administración regional. Y nada de limpiar la zona. Viva Huelva pregunta por qué el Ayuntamiento, ante la desatención de la Junta, no se hace cargo del adecentamiento del espacio: “El Ayuntamiento no se puede meter en un terreno que no es suyo”, respondieron las fuentes a bote pronto. A bote pronto porque esa respuesta, como pronto se encargaron ellas mismas de matizar, no era cierta: “El Ayuntamiento puede hacerlo de manera subsidiaria. Ir, limpiar y que la Junta lo pague”. Pero del resto de la conversación se sobreentendió que el Consistorio no tiene mucha voluntad de ejercer esa actuación subsidiaria.
Finalmente, estimaron que los trabajos en la zona oscilarían entre los 10.000 y los 12.000 euros, aseguraron que la multa puesta a la Junta “no ha sido pagada”, que al ser una administración pública “no se le puede embargar”, que es “inusual” que se tramite una multa a una administración pública y que los servicios jurídicos del Ayuntamiento de Huelva “no saben qué hacer ante el incumplimiento de la Junta”.
Compromiso de la Junta
Tras la explicación del organismo municipal, Viva Huelva se pone en contacto con la Junta, que explicita que los terrenos son propiedad de la Consejería de Fomento y Vivienda.
Las fuentes de esta consejería que atendieron la llamada de este periódico aseguraron que se está “ultimando el dispositivo” para limpiar el solar “esta semana”. El compromiso está ahí. Mientras llega y para después de que llegue, si llega, desde Fomento y Vivienda han querido aprovechar la oportunidad de esta información para “apelar a la responsabilidad ciudadana para mantener el solar”.
En cuanto a saber si se va a cumplir ese “¡menos grabar y más derrumbar!”, parece que el chico dueño de esa petición tendrá que seguir esperando. Porque lo que hará el dispositivo de la Junta esta semana (si se cumple la palabra dada) será limpiar, que no es poco, pero sin más. No se plantean ahora mismo trabajos de derrumbe para este edificio. Sería la solución definitiva para esta vergüenza. Pero, por ahora, sólo limpiarán. Eso han dicho. Estaremos pendientes.