El parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga ha acusado al Estado español de actuar como un "enemigo de la paz", al impulsar una estrategia de "criminalización expansiva" como respuesta a los "avances" que ha supuesto los recientes pronunciamientos de los presos de ETA o la manifestación del PNV y Sortu a favor de los "derechos humanos, el acuerdo y la paz".
El representante de la coalición 'abertzale' ha lanzado este mensaje durante el debate que celebra este miércoles el Parlamento vasco acerca de la operación de la semana pasada en la que se detuvo a ocho interlocutores del colectivo oficial de presos de ETA, que permanecen en prisión por su supuesta pertenencia a la organización terrorista.
El debate, celebrado a petición de EH Bildu, se está desarrollando en el seno de la Diputación Permanente de la Cámara vasca, el órgano que sustituye al pleno cuando el Parlamento -como ocurre en enero- se encuentra fuera del periodo ordinario de sesiones.
La coalición 'abertzale' pretende que la Cámara "rechace" la detención de estas personas, sobre las que afirma que "han desarrollado una actividad pública, transparente y conocida a favor de la normalización política".
Además, en la proposición no de ley que ha registrado y que se someterá a votación este miércoles, destaca que la labor de estas personas está "avalada por la libertad de expresión y el derecho de reunión pacífica".
"TRABAJO TRANSPARENTE"
Arzuaga, que ha sido el encargado de defender la iniciativa de su grupo, ha subrayado que Arantza Zulueta, Jon Emparantza y el resto de los detenidos -a los que el juez considera un "brazo operativo de ETA- trabajaban de forma "transparente" como interlocutores de los reclusos.
Dicha labor, tal y como ha destacado, tenía entre sus objetivos el de "materializar" pronunciamientos como la reciente declaración del colectivo oficial de presos de ETA (EPPK), en la que éstos asumían las vías de reinserción individualizadas y reconocían su responsabilidad en el daño causado por el terrorismo.
"¿Dónde está la actividad clandestina; de quién son tentáculos?", se ha preguntado, en relación a las imputaciones que se realizan sobre las ocho personas encarceladas. Asimismo, ha denunciado la "falta de evidencias" y de acusaciones "concretas" contra los detenidos, que ahora se encuentran en prisión preventiva. "Se ha puesto un celofán jurídico para criminalizar actuaciones políticas", ha asegurado.
Arzuaga ha destacado que la aceptación por parte del colectivo de presos de las medidas individualizadas para acogerse a beneficios penitenciarios "contradice de pleno al juez y al Ministerio del Interior", que argumentan que los interlocutores del EPPK se habían dedicado a tratar de evitar que los presos se acogieran de forma individual a la vía de reinserción.
"RESPUESTA BRUTAL"
Tras subrayar la relevancia de la declaración efectuada por el EPPK, ha lamentado que el Ejecutivo central haya optado por una respuesta "brutal y destructiva". El representante de EH Bildu ha criticado la "ocupación militar" de las calles de Bilbao que acompañó a las detenciones practicas la semana pasada.
Además, ha recordado que el mismo "tribunal de excepción" -en referencia a la Audiencia Nacional- que ordenó aquella operación, prohibió pocas horas después la manifestación convocada por 'Tantaz-Tanta' en contra de la dispersión de los presos de ETA.
Todo ello, en su opinión, responde a una "filosofía de criminalización expansiva" y a la imposición del principio de "presunción de culpabilidad". Arzuaga ha afirmado que esto constituye "la respuesta de los enemigos de la paz" a los "avances" que han supuesto los pasos dados por los reclusos de ETA y a la "voluntad" expresada por los miles de vascos que el pasado sábado, convocados por Sortu y el PNV, se manifestaron en Bilbao con el lema 'Derechos humanos. Acuerdo. Paz'