El tiempo en: Ayamonte

Sanlúcar

Imputados 21 miembros del clan de la Pinilla por blanqueo

Según la Policía Nacional, los miembros del clan evitaban ostentar la titularidad de los bienes escriturándolos a nombre de “testaferros” y así evitar que pudieran ser incautados por considerarse fruto del tráfico de drogas

Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
  • Actuación policial en febrero. -

La Policía Nacional ha culminado una investigación patrimonial imputando a veintiuna personas como presuntas autoras de un delito de blanqueo de capitales al incorporar al sistema económico y financiero las ganancias obtenidas por el “Clan de los Pinilla” a través del tráfico de sustancias estupefacientes. Entre los bienes investigados se encuentran quince fincas, cuarenta vehículos de alta y media gama así como el pago de numerosas facturas por obras y servicios cuya valoración total se estima que ronda los tres millones de euros.

En febrero de 2013 se desarrolló una importante operación policial contra el trafico de drogas tras finalizar una investigación sobre “El Clan de los Pinilla”, una conocida organización dedicada  a la adquisición, distribución y venta de sustancias estupefacientes, concretamente  cocaína y heroína que operaban en Sanlúcar de Barrameda y había sido objeto de otras investigaciones en años anteriores.

Tras la remisión el año pasado del atestado policial y la puesta a disposición de los detenidos e imputados al Juzgado Mixto número dos de Sanlúcar de Barrameda, la Policía Nacional inició una investigación patrimonial del citado clan y de su circulo de amistades con el objetivo de descubrir a las personas que pudiesen haber prestado su  ayuda para  poner en circulación el dinero obtenido de los beneficios económicos del trafico de drogas 

Los investigadores iniciaron en 2013 un exhaustivo estudio de campo donde han recopilado gran cantidad de información y documentación de las personas que podrían haber prestado su nombre y firma en contratos o negocios entre las que se encuentran los informes de vida laboral, subsidios, prestaciones sociales, extractos bancarios, contratos de compra venta, certificados del Registro de la Propiedad. Toda esta documentación ha sido analizada para descubrir el grado de participación de cada persona y  averiguar como con los beneficios obtenidos de las actividades ilícitas relacionadas con el tráfico de drogas las introducían en el mercado económico y financiero dándole  la apariencia de una procedencia lícita. La investigación ha contado con la supervisión y colaboración de la Fiscalía Antidroga de Jerez y el Juzgado Mixto Nº 2 de Sanlúcar de Barrameda los cuales han decretado los exhortos y mandamientos judiciales necesarios para la realización de las diligencias claves en la averiguación del delito.

Los miembros del Clan disfrutaban de bienes cuya titularidad eran de terceras personas

La mayor parte de los miembros del Clan utilizaban las cuentas corrientes de diferentes bancos para recibir los ingresos de prestaciones protección familiar, renta agraria y el subsidio por desempleo generado en gran parte por trabajos realizados en centros penitenciarios. La cuentas bancarias han mantenido durante estos últimos años unos saldos medios de escasa consideración y en ocasiones inexistentes, así como que gran parte de dicho dinero se ha destinado a pagos de gastos corrientes siendo muy relevantes el destinado a telefonía, canales de televisión y empresas de seguridad. 

Los escasos ingresos que les constaban en las cuentas bancarias no concordaban con el alto nivel de vida llevado tal y como quedo acreditado con la utilización de varios vehículos de alta gama y con el disfrute de los inmuebles donde fijaban su residencia o eran utilizados para su esparcimiento así como el pago en metálico de obras y mejoras de sus residencias y equipadas con mobiliario domestico de alto diseño.

Durante la investigación se comprobó como la familia Pinilla comparte compras y pagos de los bienes y servicios que disfrutan y cuya titularidad está a nombre de terceras personas.

Los investigados realizaban la conducta consistente en ocultar el origen ilícito de las ganancias procedentes de la dedicación al trafico de drogas llevando de esta forma a cabo la conducta tipificada en el código penal al  convertir bienes procedentes del tráfico de drogas en bienes de apariencia legal mediante la compra de vehículos, créditos hipotecarios, pago de servicios y otros. La actual legislación castiga a los que lleven a cabo el blanqueo de capitales independientemente si se trata del que cometió la actividad ilícita  que dan lugar al dinero, ya que a la acción castigada es dar apariencia legal al dinero y ponerlo en circulación. Por todo ello los miembros evitaban en la medida de lo posible ostentar la titularidad de las fincas, vehículos y otros bienes adquiridos escriturándolos a nombre de testaferros intentando con ello evitar su incautación en caso de fueran decomisados al considerarse como fruto de la actividad ilícita que ejercen.

Los beneficios de ser testaferros


Los miembros del Clan ofrecían a terceras personas la posibilidad de actuar como testaferros y beneficiarse así de pagos en especie o de dinero en efectivo incluso el uso y disfrute de los  vehículos comprados a su nombre con la condición de ponerlos a disposición de la familia Pinilla cuando lo necesitaran.  Durante la investigación se descubrió la cantidad  de vehículos, cerca de cuarenta, adquiridos y matriculados por estas terceras personas y asegurados a nombre de otra persona ajena al grupo intentando con ello difuminar la titularidad de los coches.

Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía adscritos a la UDYCO Bahía de Cadiz  tras reunir las pruebas incriminatorias necesarias para imputar a los investigados la presunta autoria de un delito de blanqueo de capitales, agravado por el hecho de que los beneficios eran fruto del trafico de drogas, se procedió a la detención de los implicados en la trama que fueron puestos a disposición del Juzgado mixto número dos de Sanlúcar de Barrameda junto con el atestado instruido así como las pruebas, efectos e instrumentos utilizados en la ejecución del delito.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN