El Atlético de Madrid perdió en Pamplona un encuentro vital en sus aspiraciones por el título de liga, en el que fue superado con claridad por el Osasuna en la primera parte, en la que consiguió los tres goles por medio de Cejudo (minuto 5), Armenteros (minuto 20) y Torres (minuto 41).
El conjunto rojiblanco apenas dio señales de vida y fue incapaz de reaccionar, mientras que Osasuna realizó el mejor partido de la temporada, ganó con total justicia y da un salto de gigante en busca de la permanencia.
El primer tiempo comenzó muy movido con oportunidades para Marc Bertrán y Diego Costa ante las porterías rivales, pero fueron los navarros los que fueron más intensos. Se adelantaron en el marcador a los cinco minutos. Un saque de esquina de Armenteros fue rematado por Cejudo que llegó totalmente solo, al segundo palo.
A los rojiblancos les costó mucho meterse en el partido, ante un Osasuna que lanzó seis corners en los primeros dieciocho minutos. Armenteros tuvo el 2-0 en sus botas en otra jugada a balón parado desde la esquina, y en la siguiente acción, en el minuto 20, el media punta argentino marcó el segundo gol con un tremendo zurdazo desde fuera del área, tras un error defensivo de Juanfran, que no controló bien un balón.
El primer aviso colchonero llegó en el minuto 26 con un disparo de Diego Costa desde el borde del área grande, que salió fuera. A la media hora el dominio del balón ya era rojiblanco, pero sin crear ocasiones de gol. No era el atlético fuerte y competitivo de otras jornadas, sino un equipo desconocido. Incluso, Martínez Munuera pudo expulsar a Mario Suárez por doble amarilla en una falta señalada sobre Oriol Riera.
Osasuna culminó un gran primer tiempo con el tercer gol marcado por Roberto Torres en el minuto 41, al rematar de cabeza un centro de Damiá desde la banda izquierda del ataque navarro. La defensa colchonera estuvo ausente en esta ocasión.
En la reanudación, los de Simeone apretaron buscando a Diego Costa en el área local, pero los navarros no sintieron agobios ante su portería. La salida al campo de Koke y Raúl García no solucionó los problemas del aspirante al título de liga. Faltó convencimiento por parte madrileña, mientras que Osasuna mantuvo su nivel de presión.
Los rojiblancos perdieron gas conforme pasaban los minutos, conscientes de la dificultad de igualar tres goles en contra. Una contra de Torres terminó en los pies de Cejudo, que pudo hacer el cuarto gol, pero envió el balón a la red lateral. Raúl García tuvo una oportunidad de gol muy forzada pasada la media hora, en la única situación de peligro ante el marco navarro. Tres puntos vitales para Osasuna en su esfuerzo por evitar el peligro de descenso y patinazo del atlético que ofreció una imagen muy pobre y que sólo sacó como dato positivo que ninguno de los jugadores que estaban apercibidos de sanción recibió tarjeta.
